De acuerdo con la estrategia militar del país y las decisiones del Consejo Supremo de Defensa del País (CSAT) sobre el refuerzo gradual de su capacidad de defensa aérea, el Parlamento en Bucarest ha aprobado, con carácter de urgencia, el proyecto de ley sobre la compra por Rumanía de 32 aviones de combate F-35 a EE UU. El documento había sido enviado al Legislativo por el Ejecutivo la semana pasada, fue aprobado por la Cámara de Diputados el martes y sólo un día después pasó al Senado, la cámara decisoria en este caso. Se trata de la compra más cara de la historia del Ejército de Rumanía -6.500 millones de dólares- e incluye piezas de recambio y motores, apoyo logístico, servicios de formación de pilotos y personal, simuladores de vuelo, así como munición aire-aire y aire-tierra.
El dinero necesario para esta inversión procederá del presupuesto estatal o de préstamos o garantías de préstamo del Gobierno estadounidense. Debido a la complejidad del programa de entrenamiento, no se espera que los primeros aviones F-35 lleguen a Rumanía hasta 2030. El F-35 es el avión de combate polivalente más capaz del momento. Se trata de un avión dotado de tecnología «furtiva», que lo hace menos detectable por los radares enemigos: en virtud de su construcción -la forma angular de su fuselaje y los materiales utilizados- y de su pintura con un material especial que absorbe las radiaciones electromagnéticas, el F-35 puede operar a menudo sin ser «visto» por el enemigo.
El avión también integra sensores de última generación y sistemas avanzados de comunicaciones y procesamiento de la información, lo que lo convierte en la primera plataforma aérea de 5ª generación en producción y disponible para su compra, que se espera se convierta en el avión estándar de 5ª generación en la OTAN. En Rumanía, los 32 F-35 sustituirán gradualmente a los F-16 de segunda mano comprados durante la última década a Portugal y Noruega. En una segunda fase, se espera que Bucarest compre otros 16 F-35, con el objetivo final de contar con tres escuadrones completos de aviones de combate.
Según el ministro de Defensa Nacional, Angel Tîlvăr, la tecnología militar punta adquirida gracias a la colaboración con Estados Unidos en los últimos años ha cambiado el perfil del Ejército de Rumanía en cuanto a su capacidad de acción e interoperabilidad con los ejércitos aliados. «Los sistemas de misiles Patriot y HIMARS, los vehículos blindados de transporte de tropas Piranha V, los aviones polivalentes F-16, las baterías costeras NSM y, a partir de ahora, los aviones de 5ª generación F-35, proporcionan a Rumanía una posición estratégicamente reforzada en la región, donde actuamos como pilar de estabilidad para la OTAN y aseguramos fuertes anclajes de interoperabilidad con nuestros aliados», ha declarado el ministro Tîlvăr.
Versión en español: Monica Tarău
