Cada dos años, la temporada competitiva del atletismo europeo comienza a principios de la primavera con los campeonatos continentales en pista cubierta. Aquí es donde nos hacemos una primera idea de los nuevos talentos y perspectivas internacionales.
La imagen de los recién concluidos Campeonatos Europeos de Atletismo en pista cubierta de Apeldoorn (Países Bajos) fue sorprendentemente agradable para los seguidores del atletismo rumano. La delegación rumana terminó la competición con dos medallas: oro en lanzamiento de peso masculino, por medio de Andrei Rareș Toader, y plata en triple salto femenino, por medio de Diana Ion. Fue la mejor marca de los últimos años para la selección tricolor en una competición continental de atletismo en pista cubierta.
Tras 8 años sin medallas desde la edición de 2015, los rumanos no volvieron a subir al podio hasta 2023, cuando Claudia Bobocea ganó la plata en los 1500 metros y Gabriel Bitan el bronce en salto de longitud en Estambul. Pero Rumanía llevaba 20 años sin ganar un título europeo en un campeonato en pista cubierta, desde que Elena Buhăianu se impuso en los 1500 metros femeninos en Madrid, en 2005.
Antes de la competición, las esperanzas de los entrenadores rumanos eran escasas. El objetivo fijado por la federación de atletismo rumana era lograr entre el 4º y el 6º puesto y dos clasificaciones más para la fase final.
En una entrevista a la agencia Agerpres, Oana Pantelimon, entrenadora del equipo nacional, destacó las posibilidades de Andrei Rareș Toader, que había hecho un excelente comienzo de temporada. El domingo lo confirmó. Se clasificó para la final de lanzamiento de peso en cuarto lugar con un lanzamiento de 20 metros y 59 centímetros. En la ronda final, sin embargo, logró 21 metros y 27 centímetros, 23 centímetros mejor que el segundo clasificado, el sueco Wictor Petersson. Además, el resultado supuso un nuevo récord nacional rumano.
Sin embargo, la primera medalla de la delegación rumana en Apeldoorn la ganó el viernes Diana Ana Maria Ion: plata en triple salto. Con un resultado de 14 metros y 31 centímetros, logró la marca más importante de su carrera hasta la fecha. El oro fue para la española Ana Peleteiro-Compaoré, que saltó seis centímetros más que Diana, mientras que la medalla de bronce fue para la finlandesa Senni Salminen, con 13 metros y 99 centímetros. Diana Ion había accedido a la final desde el 7º puesto en las calificaciones.
La próxima cita es el Campeonato del Mundo en pista cubierta de Nanjing (China), que se celebrará del 21 al 23 de marzo. La competición estaba prevista para 2020, pero debido a la pandemia se aplazó tres años seguidos y finalmente se ha reprogramado ahora.
Versión en español: Antonio Madrid
