Tag: déficit por cuenta corriente

  • Qué esperan los empresarios del próximo Gobierno

    Qué esperan los empresarios del próximo Gobierno

    Reunidos el lunes en un evento en línea dedicado, los empresarios advirtieron del peligro de una recesión económica en Rumanía en el segundo semestre de 2025 y pidieron al futuro ejecutivo que tome medidas para evitar este escenario. Recordaron que 2024 fue un año extremadamente difícil, en el que el entorno empresarial se enfrentó, además del difícil contexto económico y geopolítico, a una importante inestabilidad en el plano fiscal y presupuestario interno.

    «Rumanía se encuentra en un contexto extremadamente frágil, siendo el único país de la UE que combina dos déficits importantes: tenemos un déficit presupuestario estimado del 7,9% y un déficit por cuenta corriente del 8,4%, pero con presunciones muy altas de que vaya a aumentar de aquí a finales de 2024. Porque las estadísticas muestran que en los últimos cinco años, en diciembre, el déficit por cuenta corriente aumenta al menos un 1,5%, sobre todo porque 2024 estuvo marcado por las elecciones. Y en el primer semestre de 2025 volverá a haber elecciones», comentó Cristina Chiriac, presidenta de la Confederación Nacional de Mujeres Empresarias (CONAF), quien añade:

    «Creo que si queremos evitar una recesión económica, necesitamos ajustar los déficits presupuestario y por cuenta corriente sin adoptar medidas difíciles. Es decir, tenemos que reducir el gasto público, especialmente en el ámbito del gasto no productivo, tenemos que aumentar la eficiencia de la recaudación de ingresos fiscales y evitar la sobrecarga fiscal en el entorno empresarial».

    Los empresarios también afirmaron que en las condiciones actuales, cuando los presupuestos deben modificarse casi cada tres meses para adaptarlos a los cambios fiscales o legislativos, las empresas emprendedoras ya no tienen medios para trabajar con presupuestos plurianuales, elaborar planes de negocio o hacer previsiones para el futuro. La necesidad de previsibilidad también fue subrayada por Feliciu Paraschiv, vicepresidente de la Asociación Nacional de Pequeños y Medianos Comerciantes de Rumanía:

    «Tenemos grandes problemas con el déficit presupuestario, tenemos problemas con la inflación persistente, y ambos se juntan. Pero si miramos un poco más de cerca, tenemos una fiscalidad incierta, más cambios legislativos que nunca. Ni siquiera podríamos sentarnos a hacer un plan para los próximos meses, surgiría algo nuevo entretanto».

    Los empresarios también hicieron hincapié en la importancia de mantener la inflación bajo control, así como de evitar la aplicación de otras medidas como la facturación o el transporte electrónicos, que han dificultado la actividad de las empresas. Asimismo, hicieron un llamamiento a la clase política para que haga uso de la experiencia empresarial y adopte medidas encaminadas al funcionamiento de la economía solo después de consultar realmente a todas las partes interesadas.

    Versión en español: Antonio Madrid

  • Previsiones económicas para Rumanía

    Previsiones económicas para Rumanía

    La agencia internacional de calificación Standard & Poor’s ha reconfirmado la buena calificación de la deuda pública rumana y su perspectiva estable. La decisión, según los expertos de la agencia, se basa en la buena evolución económica y la probabilidad de un fuerte crecimiento en los próximos tres años.

    El moderado nivel de deuda externa es uno de los argumentos. Destaca también la buena situación del mercado laboral, donde el desempleo se mantiene cerca de mínimos históricos. Según la fuente, la economía rumana crecerá un 1,6% en 2024 y se duplicará en 2025-2027, ya que el país se beneficiará de importantes fondos europeos, tanto del marco financiero plurianual como del Mecanismo de Recuperación y Resistencia. Aunque también hay advertencias de la agencia de calificación.

    La calificación de Rumanía podría rebajarse si el déficit sigue superando las previsiones y si persisten otros desequilibrios, como una inflación elevada o un déficit por cuenta corriente, es decir, la diferencia entre unas importaciones elevadas y unas exportaciones reducidas. Standard & Poor’s también ha advertido de que el gasto preelectoral en curso elevará el déficit de Rumanía al 7,3% este año. La agencia estima que el gasto global aumentará tras los incrementos salariales del sector público del 20%, o unos 14 000 millones de leus (equivalentes a unos 3000 millones de euros), y una subida de las pensiones a partir de septiembre, equivalente al 0,6% del producto interior bruto.

    Esta agencia de calificación también señala un aumento del gasto militar hasta casi el 2,5% del PIB este año, así como una elevada inversión pública de alrededor del 7% del PIB, sólo parcialmente cubierta por fondos de la UE.

    Standard & Poor’s es una de las tres principales agencias internacionales de calificación financiera. Las otras dos son Fitch y Moody’s. Todas realizan evaluaciones independientes de la capacidad de los países del mundo para pagar sus deudas. Según una guía publicada por la web financiera Global Investopedia, la calificación de un país tiene en cuenta sus resultados económicos, el volumen de inversión extranjera pública y privada, la transparencia del mercado de capitales, las reservas de divisas y la estabilidad política.

    En una primera reacción al anuncio de Standard & Poor’s, el PSD-PNL de Bucarest declaró que la decisión de la agencia, tras la similar anunciada por Fitch en verano, es una prueba de la estabilidad macroeconómica y las perspectivas de desarrollo de Rumanía. Los líderes de la oposición y los expertos independientes se muestran menos eufóricos, acusando el vaso medio vacío.

    Veterano del análisis económico nacional, el profesor Mircea Coșea ha declarado a Radio Rumanía que el diagnóstico de esta agencia es muy objetivo. «Hay que reconocer que Rumanía va bien», dijo, añadiendo, sin embargo, que este hecho implica una obligación extraordinaria para la actual dirección política y para la que vendrá tras las elecciones presidenciales y parlamentarias de finales de año.

    Versión en español: Antonio Madrid

  • Calificación positiva de Standard & Poor’s

    Calificación positiva de Standard & Poor’s

    La agencia internacional de calificación Standard & Poor’s ha vuelto a confirmar la buena calificación de la deuda pública de Rumanía y su perspectiva estable para la deuda en divisas a largo y corto plazo. En general, la calificación de un país tiene en cuenta factores como la evolución de la economía, el volumen de inversión extranjera pública y privada, la transparencia del mercado de capitales y las reservas de divisas, así como el grado de estabilidad política.

    En el caso de Rumanía, la decisión se basó principalmente en la buena evolución económica, un nivel moderado de deuda externa y unas perspectivas de fuerte crecimiento para los próximos tres años. El informe también destaca la buena situación del mercado laboral, donde el desempleo se mantiene cerca de mínimos históricos.

    Según el documento, la economía rumana crecerá un 1,6% este año, pero se duplicará en los próximos tres años, con una media en torno al 3%, ya que el país se beneficiará de importantes fondos europeos, tanto del Marco Financiero Plurianual como del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia.

    No obstante, la agencia de calificación advierte que Rumanía podría ver rebajada su calificación si el déficit supera las previsiones y si persisten otros desequilibrios, como una inflación elevada o un déficit por cuenta corriente, es decir, la diferencia entre unas importaciones elevadas y unas exportaciones reducidas. La agencia también advierte de que el actual gasto preelectoral elevará el déficit de Rumanía al 7,3% este año.

    También estima que, en conjunto, el gasto aumentará anualmente tras los incrementos salariales del sector público del 20%, que costarán alrededor del 1% del PIB, y la subida de las pensiones a partir de septiembre de este año, que costará aún el equivalente al 0,6% del PIB. Standard & Poor’s también señala el aumento del gasto militar hasta casi el 2,5% del producto interior bruto este año y la elevada inversión pública, de alrededor del 7% del PIB, sólo cubierta en parte por los fondos europeos.

    En una publicación en línea, el primer ministro Marcel Ciolacu ha declarado que la decisión de la agencia, tras otra similar anunciada por Fitch en verano, es una prueba de la estabilidad macroeconómica y de las perspectivas de desarrollo de Rumanía. El primer ministro admitió que aún queda mucho trabajo por hacer, refiriéndose al plan para reducir el déficit en los próximos siete años mediante la racionalización del gasto y el aumento de la recaudación de impuestos a través de la digitalización de la Hacienda rumana (ANAF), la reducción de la evasión fiscal y la continuación de las inversiones.

    El jefe del Ejecutivo ha reiterado que el análisis de Standard & Poor’s confirma «el camino seguro para Rumanía: producción, inversión, empleo, poder adquisitivo y estabilidad macroeconómica».

    Por su parte, el ministro de Finanzas, Marcel Boloș, declaró que la reconfirmación de la calificación de Rumanía es una señal positiva que obliga al Gobierno a proseguir las reformas, hacer más eficiente el gasto público y reducir la presión sobre el presupuesto.

    Versión en español: Antonio Madrid