Cada cuatro años, los mejores deportistas del mundo compiten en los Juegos Olímpicos. Este año, el evento reúne a 10 700 competidores de 206 países y territorios. Con una delegación de más de cien deportistas, Rumanía se encuentra entre los países mejor representados, 100 años después de la primera medalla olímpica de los tricolores, ganada también en París, en rugby. En total, a lo largo del tiempo, los atletas rumanos han obtenido 313 medallas olímpicas, de las cuales 92 de oro, 98 de plata y 123 de bronce. Los miembros de la delegación rumana ya han destacado en París desde los primeros días de competición.
Con la medalla de oro en los 200 metros libres y el bronce en los 100 metros, David Popovici estuvo entre los nadadores más premiados. Con apenas 19 años, el deportista del Dinamo de Bucarest, doble campeón del mundo y cinco veces campeón de Europa, completó su palmarés con las únicas medallas que le faltaban, las olímpicas.
Luego llegaron las primeras medallas para los remeros: oro en doble scull masculino y plata en la misma prueba femenina, lo que supuso un salto notable en una disciplina donde, en los últimos tiempos, la mayoría de resultados se han conseguido en la modalidad de scull.
Tampoco hay que olvidar los avances logrados en la gimnasia. Otrora la disciplina más premiada, con 25 medallas de oro, 20 de plata y 26 de bronce, la gimnasia no nos da satisfacciones desde 2012, en Londres, cuando Sandra Izbaşa ganó el oro en salto, Cătălina Ponor se llevó la plata en suelo y el equipo femenino ganó las medallas de bronce. Ahora, las chicas lograron volver a entrar en la cima de las naciones, terminando en el séptimo lugar en la competencia por equipos y obteniendo varias clasificaciones a las finales individuales.
Las mayores expectativas para las próximas jornadas se centran en el remo, donde el sábado están previstas las últimas finales. También en el agua esperamos medallas del múltiple campeón mundial de piragüismo Cătălin Chirilă. Esta es la continuación de una tradición de rendimiento de casi siete décadas que comenzó con las dos medallas de oro ganadas por Leon Rotman en 1956 en los Juegos de Melbourne y continuó con los cuatro títulos ganados por Ivan Patzaichin entre 1968 y 1984.
Tenemos expectativas, como siempre, del atletismo, pero los últimos resultados en las competiciones mundiales y europeas nos obligan a moderar nuestro optimismo.
Por último, en halterofilia, Rumanía estará representada por dos deportistas con buenas posibilidades de medallas: Loredana Toma, con 71 kilos, y Mihaela Cambei, con 49. Loredana ocupa el 4º puesto del ranking mundial en su categoría, y Mihaela, en el 5º puesto. En la competición importará, por supuesto, el estado de forma actual, pero también la ambición que las dos competidoras han demostrado cada vez que ha sido necesario.
