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  • Película rumana premiada en Venecia

    Película rumana premiada en Venecia

    La película rumana El año nuevo que nunca fue, dirigida, escrita y producida por Bogdan Mureșanu, ha sido galardonada en el Festival Internacional de Cine de Venecia de este año, clausurado el sábado por la noche. Se trata del Premio FIPRESCI, otorgado por el jurado de la Federación Internacional de Críticos de Cine, y del Bisato d’Oro 2024 al Mejor Guion, concedido por la crítica independiente.

    La película destaca por su ambiciosa y notable dirección, su reflexiva visión política, su sofisticada y atractiva narración, su artístico equilibrio de tonos y su excepcional reparto, elogiaron los miembros del jurado de la FIPRESCI. Según ellos, el largometraje culmina una profunda exploración del comportamiento humano, influido por el miedo a la represión política que comparten muchas generaciones que vivieron bajo un régimen autoritario.

    Por su parte, la crítica independiente, que concedió el premio Bisato d’Oro, opina que el guion de Bogdan Mureșanu ilustra con sensibilidad un momento crucial de la historia rumana, entrelazando de manera excepcional «los destinos de personajes distintos y poderosos, al tiempo que nos ofrece una historia conmovedora y un estudio único del alma, una verdadera comedia humana».

    En la proyección del festival, la película fue aplaudida y vitoreada durante minutos por un público de 1400 espectadores. La ópera prima del director Bogdan Mureșanu es una tragicomedia ambientada en un solo día antes de la Revolución anticomunista de diciembre de 1989 y cuenta en el reparto, entre otros, con Emilia Dobrin, Mihai Călin y Nicoleta Hâncu, además de numerosas referencias a lo sucedido en los días previos en Timișoara.

    «Hacemos películas con el secreto deseo de agradar al público, pero también de ser apreciados por quienes escriben sobre cine. Un premio tan importante significa para mí más que una apreciación de la película. Es una señal de diálogo más allá de las fronteras. No hay nada más que eso», señaló el director Bogdan Mureșanu.

    Boroka Biro, director de fotografía de la película El año nuevo que nunca fue, también ha sido galardonado con la mención especial a la imagen Premio Autrici under 40 “Valentina Pediciniˮ. El galardón reconoce el talento de un autor menor de 40 años por una actuación destacada en dirección, guion, montaje, fotografía en una película presentada en las secciones Orizzonti, Orizzonti Extra, Giornate degli Autori y Settimana Internazionale della Critica.

    Boroka Biro es la primera directora de fotografía que recibe este premio, que celebra su cuarta edición bajo los auspicios de «Venezia a Napoli. Il Cinema Estesoˮ. El film El año nuevo que no fue es el segundo largometraje de ficción en el que trabaja como directora de fotografía.

    Versión en español: Antonio Madrid

  • Noticias del día

    Noticias del día

    Titulares:

    Dos grupos delictivos organizados especializados en ciberdelincuencia y blanqueo de capitales han sido desmantelados tras la colaboración de fiscales rumanos y estadounidenses.

    La película rumana «El año nuevo que nunca fue», dirigida, escrita y producida por Bogdan Mureșanu, recibe dos premios en el Festival Internacional de Cine de Venecia.

    Los atletas rumanos ganaron medallas de oro y bronce en los Juegos Paralímpicos de París.

     

    Delincuencia organizada – Dos grupos delictivos organizados, especializados en ciberdelincuencia y blanqueo de capitales, han sido desmantelados gracias a la cooperación entre investigadores rumanos y las autoridades policiales estadounidenses. En 2021 se estableció en el territorio del estado de California una estructura formada por ciudadanos rumanos y búlgaros, que operó hasta hace poco. Utilizando equipos especializados, los miembros copiaban los datos de las tarjetas de residentes en EE.UU. y realizaban retiradas de efectivo. El perjuicio total supera el millón de dólares. Además, parte del dinero llegaba a Rumanía, a través de sistemas de transferencia de dinero o de empresas de transporte, para ser blanqueado en bienes de consumo. Tras los registros efectuados en Rumanía, se encontraron e incautaron decenas de miles de euros y dólares.

     

    Cine Venecia – La película rumana «El año nuevo que nunca fue», dirigida, escrita y producida por Bogdan Mureșanu, recibió dos premios en el Festival Internacional de Cine de Venecia: el Premio FIPRESCI -otorgado por el jurado de la Federación Internacional de Críticos de Cine- y el Premio Bisato d’Oro 2024 al mejor guión, concedido por la crítica independiente. «La película culmina con una profunda exploración del comportamiento humano influido por el miedo a la represión política, compartido por muchas generaciones que vivieron bajo un régimen autoritario. Apreciamos esta película por su reflexiva visión política, su sofisticada y atractiva narración, su artístico equilibrio de tonos y su excepcional reparto», señalaron los miembros del jurado FIPRESCI. La directora de fotografía de la película, Boroka Biro, fue galardonada con la mención especial del Premio Autrici para menores de 40 años «Valentina Pedicini», que reconoce el talento de una autora menor de 40 años por sus destacados logros en dirección, guión, montaje o fotografía.

     

    Juegos Paralímpicos 2024 – La jugadora rumana Camelia Ciripan ganó el sábado la medalla de bronce en tenis de mesa adaptado individual femenino en los Juegos Paralímpicos de París, tras ser derrotada en semifinales por la ucraniana Marina Litovcenko, por 3-0 (11-5, 11-7, 11-5) – anunció la Agencia Nacional para el Deporte (ANS). Camelia Ciripan, de 45 años, designada Deportista Paralímpica Rumana del Año 2022 tras obtener la medalla de bronce en los Campeonatos del Mundo de Tenis de Mesa Adaptado en España, fue la abanderada de Rumanía en la ceremonia de apertura de los Juegos Paralímpicos en París. La medalla de bronce de Camelia Ciripan llega un día después de que el atleta rumano Florin-Alexandru Bologa ganara la medalla de oro en judo para ciegos, cat. 73kg (J1) tras derrotar por ippon en la final al kazajo Iergali Shamei. Rumanía cuenta con seis atletas en esta edición de los Juegos Paralímpicos: Alexandru Bologa y Daniel Vargoczki en judo, Eduard Novak y Theodor Matican en ciclismo, Camelia Ciripan y Bobi Simion en tenis de mesa.

     

    Italia-Ucrania – La primera ministra, Giorgia Meloni, prometió un apoyo inquebrantable a Ucrania durante su reunión del sábado con el presidente Volodímir Zelenski. Sobre la mesa, entre otras cosas, estaban los planes de Kiev para poner fin a la guerra con Rusia, así como los planes de reconstrucción del país. Meloni se reunió con el dirigente ucraniano al margen del foro La Casa de Europa, organizado en Cernobbio (provincia de Como), mientras Italia se prepara para acoger una conferencia sobre la reconstrucción de Ucrania en 2025. En un post publicado el sábado en las redes sociales, Zelenski afirma haber discutido con Giorgia Meloni sus planes de paz, así como su estrategia de reconstrucción, centrándose en el sistema energético de Ucrania.

     

    Terremoto – Un débil sismo, de magnitud 3,8, se produjo el sábado por la mañana en el suroeste de Rumanía. Según los datos publicados por el Instituto Nacional de Investigación y Desarrollo de Física de la Tierra, el sismo se produjo a 17 km de profundidad, cerca de la capital, Târgu Jiu. Desde principios de este mes se han producido ocho sismos de baja intensidad en Rumanía. El sismo más importante de este año, de magnitud 4,7, se registró el 11 de agosto en Arad (oeste). El 4 de marzo de 1977, uno de los terremotos más fuertes que han sacudido Rumanía, con una magnitud de 7,2 en la escala de Richter, mató a 1.570 personas, la mayoría de ellas en Bucarest, y causó daños materiales por valor de más de 2.000 millones de dólares. Aproximadamente 230.000 viviendas quedaron destruidas o gravemente dañadas, mientras que cientos de unidades económicas cerraron permanentemente. El terremoto generó una crisis económica y social que, según los historiadores, la dictadura comunista de la época no logró superar hasta su colapso en 1989. Los especialistas advierten de que, en caso de terremoto similar al de 1977, sólo en Bucarest podrían derrumbarse cientos de edificios. Cada año se registran en Rumanía más de 100 sismos de magnitud superior a 3 en la escala de Richter.