Rumanía ha registrado informes récord sobre la evolución de la pandemia. La semana pasada se diagnosticaron la mayoría de los casos del nuevo coronavirus, con más de 168.000, pero también la mayor cantidad de enfermedades diarias, más de 34.000 el miércoles. El número de muertes diarias sigue siendo menor que en la ola de otoño, pero la evolución de la pandemia entre los niños es preocupante, dado que las escuelas de todo el país están abiertas en formato físico porque ningún distrito ha llegado al 75% de las camas de COVID ocupadas. 3.800 niños fueron confirmados con COVID el pasado domingo, y casi 36.000 en la última semana.
Los niños se han convertido en vector de transmisión del nuevo coronavirus, y los casos se multiplican exponencialmente de un día para otro, dice la presidenta de la Asociación de Médicos de Cabecera de Ialomiţa (sureste), Andreea Radu:
“Se sabe que los pequeños transmiten esta enfermedad con mucha facilidad, estando en grandes comunidades. Aunque esta versión de ómicron parece tener una evolución más fácil en comparación con las demás, especialmente con la del Delta de otoño, nunca sabes en qué categoría estás, si realmente tendrás una buena evolución o no.
Se están abriendo salas de pediatría COVID en algunos hospitales del país para tratar casos graves del nuevo coronavirus en niños. El gerente del Hospital de Emergencia de Slobozia (sureste) Liviu Patrichi, señala que estos casos se están multiplicando:
“El problema que tenemos, a diferencia de las otras olas de pandemia, es el aumento de casos pediátricos medianos y leves. Hemos abierto una sala de pediatría de COVID y operamos con ella al aforo asumido en el plan de resiliencia. Tenemos nueve camas dedicadas a pediatría.
(versión en español: Simona Sarbescu)