El ejecutivo de Bucarest aprobó la primera rectificación presupuestaria, que aumentará el déficit presupuestario. El primer ministro Marcel Ciolacu cree que la rectificación es sostenible porque el 84% del déficit son gastos de inversión y el dinero se devolverá al Estado. La rectificación es positiva y se sustenta en el aumento de los ingresos y en el incremento del déficit hasta el 6,9%. El primer ministro subrayó que se seguirá apoyando la inversión, no el consumo. Puso el ejemplo de las autopistas, que devolverán ocho veces más dinero del que se gastó en su construcción. Marcel Ciolacu:
«Naturalmente, el Estado transfiere primero el dinero al ministro de Transportes, Sorin Grindeanu, este se lo da a las empresas, y estas terminan nuestras autopistas, que llevamos 30 años esperando, y con un retraso de uno o dos meses, los impuestos vuelven al Estado. Pero, es más, en el siguiente periodo, al menos lo que hay en infraestructuras se multiplica en la economía hasta múltiplos de ocho. Pones un euro, te devuelven 6 u 8 euros, en un ámbito en el que hemos canalizado mucho la inversión en este momento».
El primer ministro también afirmó que continuarán los recortes del gasto público innecesario. La sanidad, el transporte y la educación reciben fondos adicionales como consecuencia de la rectificación. También se incrementan los presupuestos de la Seguridad Social para pagar las pensiones recalculadas, que han aumentado desde el 1 de septiembre, así como las prestaciones por desempleo y las cotizaciones a la Seguridad Social correspondientes.
Además, se destinará dinero extra a los ministerios de Sanidad, Interior, Proyectos Europeos, Agricultura y Energía. En cambio, otras instituciones públicas tendrán presupuestos más reducidos. Entre ellas figuran la Secretaría General del Gobierno, el Ministerio de Economía, el Senado y la Cámara de Diputados, el Servicio Especial de Telecomunicaciones y el Ministerio de Fomento.
La propuesta de rectificación presupuestaria se basa en el aumento de los ingresos y los gastos, que se han elevado considerablemente. Según los economistas, esto conducirá a un déficit del 2%, por encima de la estimación de las autoridades del 5% a principios de año. Esto se produce en el contexto de una previsión de crecimiento económico revisada a la baja, del 3,4% al 2,8% del PIB. La Comisión Nacional de Estrategia y Previsión (CNSP) prevé un crecimiento del PIB del 3,5% en 2025 y del 3,7% en 2026.
La inflación a finales de año se prevé en el 4,5%, por encima del objetivo del BNR del 4%, para bajar al 3,8% el año próximo y al 2,9% en 2026. El déficit comercial aumentará a 32 700 millones de euros este año, frente a 28 900 millones el año pasado, según la Comisión de Previsiones, tras un aumento de las exportaciones (1,8%) y las importaciones (4,5%). El tipo de cambio medio se prevé en 4,98 leus/euro este año, y el salario medio neto mensual podría aumentar un 14,8% en 2024, hasta los 5.066 leus (unos 1020 euros).
Versión en español: Antonio Madrid
