Category: Rumanía, mi casa

  • Color y creatividad al estilo Bauhaus en Bucarest

    Color y creatividad al estilo Bauhaus en Bucarest

    Alemania en 1919 dio origen al concepto Bauhaus, que es una combinación de dos palabras alemanas: bau (construir) y haus (casa). Extremadamente influyente en la arquitectura, las bellas artes, la escultura, el diseño de interiores e industrial, la fotografía, la tipografía, los objetos domésticos, los adornos y ornamentos, el mobiliario y la decoración de interiores del siglo XX, esta escuela y movimiento artístico, creado por el arquitecto y pedagogo alemán Walter Gropius en Weimar, tuvo su apogeo entre 1919 y 1933 en tres ciudades alemanas –Weimar, Dessau y Berlín–, convirtiéndose con el tiempo, a pesar de ser prohibida por los nazis en 1933, en una de las corrientes artísticas más importantes e inspiradoras de la arquitectura moderna.

    Con la emigración del fundador del movimiento artístico de la Bauhaus, Walter Gropius, a los Estados Unidos, el movimiento artístico experimentó un renacimiento conocido genéricamente como Nuevo Bauhaus, o Nuevo Estilo Bauhaus.

    Más de un siglo después, la corriente Bauhaus se convierte en un factor educativo que estimula a los jóvenes de Bucarest a descubrir nuevas posibilidades de expresión. Bauhaus 2024 es la exposición que tiene lugar en el Museo Nacional de Literatura Rumana, en Bucarest y reúne obras de niños de varios institutos. Nicolae Stoian, artista visual, nos recomienda la exposición:

    «Una exposición extraordinaria que pone de manifiesto los conceptos de Bauhaus, esta escuela de entreguerras, que todavía hoy nos impresiona por los principios que promovió, relacionados con el arte, el diseño, el concepto moderno, ideas que los jóvenes también adoptan. En esta exposición, nos enfocamos en los jóvenes de las escuelas secundarias».

    Alexandru Cristian Ghezea, de la Escuela Técnica de Obras Públicas y Arquitectura Ion N. Socolescu de Bucarest, que expone dos obras, nos cuenta:

    «Hoy es un día muy especial y estamos en el Museo de Literatura Rumana donde se ha organizado una gran inauguración de Bauhaus, una escuela alemana muy importante fundada en 1919. Aquí tenemos una gran cantidad de obras expuestas, desde jóvenes hasta mayores, desde el noveno grado hasta el duodécimo grado, de diferentes escuelas secundarias, escuelas secundarias de arquitectura, como de la que yo procedo, o bien de matemáticas e informática o de ciencias naturales. Hay mucha variedad».

    Alexandru Cristian Ghezea nombró su obra Composición al estilo Bauhaus en la visión de un rumano y nos explica por qué:

    «Estuve en Alemania, visité Berlín. Bauhaus tiene su sede en una ciudad del oeste de Alemania, no realmente en Berlín, pero por ejemplo en Berlín encontré en muchas confiterías o cafés, esa tetera al estilo Bauhaus que, creo, Marcel Breuer la diseñó, aunque no estoy seguro de ello. Marcel Breuer es quien diseñó la silla que yo dibujé que, asimismo, la encontré muy a menudo en diferentes áreas de Berlín y es muy bonita».

    De hecho, investigué un poco más tarde y descubrí que la artista alemana Marianne Brandt diseñó la tetera Bauhaus, retomando el diseño de una tetera convencional y le quitó todos los adornos para crear su propio infusor y filtro de té geométrico en 1924.

    ¡Pero las creaciones de nuestro interlocutor más joven realmente merecen atención! Así como las de Francesca Vlădaraş, alumna en el Colegio Nacional Ion Creangă, que nos habla de su trabajo en la exposición y de lo impresionada que estaba por la presencia de las obras de tantos niños talentosos:

    «Estoy aquí con una silla representativa del estilo Bauhaus, hecha el año pasado, junto con otro tablero que tiene otras composiciones también del estilo Bauhaus, como la taza de la que hablaba antes mi colega y dos lámparas representativas. Me gustan mucho todas las obras, sobre todo porque son muy diversas, de varios lugares y de varias clases, del noveno al duodécimo grado. ¡Me parece que son niños con mucho talento! Y realmente desearía haber estado en la escuela secundaria Socolescu, que es muy hermosa, y me hubiera gustado pasar más tiempo dibujando, como hace mi colega».

    La profesora Grațiela Stoian, artista visual, es quien anima a los alumnos de la Escuela Nacional de Informática Tudor Vianu a descubrir su lado artístico:

    «Tengo el placer de seleccionar a los alumnos que a su vez tienen este deseo de desarrollarse a través del arte. Y no lo pueden creer porque me dicen: “señora, pero yo no tengo talento” y les explico que no tienen que tener talento sino ideas o conceptos, para poder documentarse ante todo. El arte es extraordinario y está vinculado a todas las asignaturas, no solo a la escultura, la pintura, la gráfica y así por el estilo, sino también a la física, las matemáticas y la biología. Y yo les sigo explicando que solo si miramos bajo un microscopio vemos algunos milagros allí, por no hablar de Fibonacci, las matemáticas, la física, el espectro de la luz y el arco iris. Entonces cuando contamos historias sobre estas cosas, incluso los niños que no se dedican al arte logran hacer cosas muy hermosas».

    Rojo, azul y amarillo, círculos, cuadrados y triángulos, abstracto y concreto, bellamente combinados, las obras de la exposición Bauhaus 2024 expresan la juventud en acción.

    Versión en español: Mihaela Stoian

  • Bacademia. Bachillerato para todos

    Bacademia. Bachillerato para todos

    Las pruebas de bachillerato del año 2024 tuvieron la tasa de aprobados más alta de los últimos 10 años, del 76,4%. Sin embargo, el enfrentamiento con el examen de madurez asusta a muchos, por lo que varios estudiantes de Cluj, después de graduarse de la escuela secundaria con medias elevadas y aprobar el Bachillerato con éxito, pensaron en facilitar esta experiencia a estudiantes menos afortunados que ellos. Bacademia se convirtió en el nombre del proyecto, lanzado bajo el lema: Consigue el bachillerato sin molestarte.

    La fundadora del proyecto Bacademia, Bianca Ionescu, nos cuenta:

    «Nuestra historia comenzó en 2022. Ese año, me presenté al examen de bachillerato y saqué un 10 en historia, y un 9.80 en lengua y literatura rumanas. Aunque había participado en la olimpiada nacional de lengua y literatura rumanas desde la escuela primaria y seguí compitiendo durante toda la escuela secundaria, todavía sentía el estrés de cualquier alumno de duodécimo grado a medida que se acercaba el examen de bachillerato. Y luego, después de hacer el examen, opté por digitalizar los materiales que había estructurado. Había pasado seis meses estructurando el tema yo sola. En 2022 comencé a ayudar a otros alumnos en línea. Estuve compartiendo esos materiales, de forma gratuita, en una cuenta de Instagram y básicamente la generación que se presentó al examen en 2023 fue la primera generación a la que ayudé. Y la idea de Bacademia empezó a tomar forma solo cuando los alumnos me enviaron sus resultados de bachillerato. Por ejemplo, de los aproximadamente 3000 alumnos a los que ayudé, la mayoría aprobó el examen con una nota superior a 9,50. Algunos incluso habían obtenido un 10 perfecto. Por ejemplo, las personas que se han presentado al examen después de 10 o 20 años también habían obtenido muy buenas calificaciones. Y básicamente en ese momento me di cuenta de que mis materiales realmente tenían un impacto positivo».

    Alumna hasta hace poco, Bianca Ionescu, añade:

    «Los alumnos estaban cansados de los libros gruesos, escritos en blanco y negro y llenos de detalles no necesarios para el bachillerato, y yo entendía su frustración porque estuve en su lugar. Estamos en un país donde se nota que la situación de cara a los exámenes no cambia mucho, no mejora respecto a años anteriores. Han pasado 10 meses desde que creamos la Editorial Bacademia y nos diferenciamos, de alguna manera, por el hecho de que nuestro equipo está formado únicamente por alumnos que han obtenido un 10 en el examen de bachillerato, o en determinadas asignaturas. Y además, todas nuestras colecciones están coloreadas y sintetizadas. También incluye, por ejemplo, consejos, temas resueltos o chistes de vez en cuando, chistes que la generación actual entendería sin duda».

    Irina Selagea, es la autora del libro de geografía de Bacademia y responsable de los vídeos interactivos en las redes sociales. Le preguntamos qué significa Bacademia para ella:

    «Soy el tipo de persona a la que le gusta ayudar a la gente y estoy muy interesada en aportar una nueva perspectiva a la hora de estudiar para el bachillerato, porque la mayoría de la gente piensa que es simplemente un examen en el que tienes que esforzarte. Pero me gustaría llegar a la idea y a la solución de que cualquier examen de bachillerato se pueda aprobar muy fácilmente solo a través de la comprensión, las bromas y solo de una manera más divertida que a través de los materiales muy caros o los materiales muy largos. Se me ocurrió la solución para los alumnos que son de la generación Z, que entienden de manera diferente cómo aprender ciertas asignaturas. Y, simplemente, quería traer una nueva versión para motivar al alumno, tal vez, a leer la literatura rumana de una manera más inconformista».

    Como retroalimentación, el equipo de Bacademia afirma que varios alumnos les dijeron que, con la ayuda de estos materiales, memorizaban toda la clase de una hora en un minuto.
    ¡Y el equipo continúa su trabajo! Bianca Ionescu:

    «Todavía nos faltan las colecciones de informática, química y física, y estamos trabajando en ellas en este momento. Se publicarán en algún momento, en septiembre, esperamos que alrededor de mediados de mes. Nuestro éxito, en gran parte, se debe a la plataforma TikTok. Ahí es donde nos hicimos populares con vídeos hechos con inteligencia artificial, por ejemplo. Hasta ahora hemos recogido casi un millón de visitas en la cuenta».

    No queda nada más que decir que: ¡buena suerte aprendiendo! Ahora parece más fácil.
    Versión en español: Mihaela Stoian

  • Agua del Danubio, buena para beber

    Agua del Danubio, buena para beber

    En 1897, la reina Guillermina de los Países Bajos financió la construcción de una torre de agua en Sulina. Esto sucedió después de amarrar su barco en el Danubio, en la ciudad portuaria del mar Negro, y después de ver que, al pedir agua para beber, le ofrecieron agua del Danubio.

    Más tarde, después de 126 años, una ambientalista holandesa, Li An Phoa, fundadora del movimiento de los Ríos Potables, y su pareja, Maarten van der Schaaf, llegaron al delta del Danubio tras recorrer tres tramos diferentes a lo largo del río, analizando la calidad del agua danubiana como agua potable.

    El Danubio, bueno para beber forma parte del proyecto europeo Restauración de la cuenca hidrológica del Danubio para los ecosistemas y las personas, desde las montañas hasta el mar. ¡El Danubio para todos! (versión original: Restoration of the Danube River Basin for ecosystems and people from mountains to coast – Danube4all).

    Con el propósito de hacer que los ríos del mundo sean ecológicamente saludables (y por lo tanto lo suficientemente limpios) como para que su agua sea potable, Li An Phoa se embarcó en un viaje a pie por el delta del Danubio del 18 de septiembre al 11 de octubre. A lo largo de su recorrido, se reunió con agricultores, escolares, pescadores, empresarios, políticos y dirigentes, y habló con ellos sobre la visión del Danubio con agua potable. Li An Phoa:

    «Era importante para el proyecto El Danubio para todos elegir uno de los sitios de demostración y cuando vi que uno de ellos estaba en Rumanía, elegí ir y recorrer los tramos del Danubio en Rumanía. Si tuviera que recorrer todo el río desde el manantial hasta el mar, que es siempre lo que más me gusta, me habría llevado más de un año. Así que decidimos no hacer eso. Ya había estado tres veces en Rumanía, en Transilvania, y me gustó tanto que estaba deseando centrarme en Rumanía. Así que esa fue la primera motivación. Al mismo tiempo, tomamos esta decisión porque un tercio del Danubio se encuentra en Rumanía, por lo que la importancia de un Danubio saludable para Rumanía también es muy alta».

    Nuestra interlocutora nos confesó que viniendo de los Países Bajos, un país que tiene un delta, pudo apreciar aún más el delta del Danubio, al unirse a WWF (World Wildlife Fund) y a GeoEcoMar (Instituto Nacional de Investigación y Desarrollo en Geología y Geoecología Marinas) y juntos eligieron los lugares relevantes para explorar.

    Li An Phoa, fundadora del movimiento de los Ríos Potables:

    «Elegimos tres lugares en el delta del Danubio, básicamente fuimos a lo largo de la laguna y luego a las zonas húmedas restauradas cerca de Mahmudia, los humedales de Carasuhat. Y la segunda semana tuvimos una vista muy diferente. Caminamos un poco a lo largo del Danubio, pero caminamos sobre todo por las zonas inundables hasta la confluencia con el río Jiu. Y luego fuimos a contracorriente a lo largo del río Jiu durante dos días. Así que vimos la zona de la llanura y el río Jiu y la zona de confluencia. Finalmente, la tercera semana estuvimos cerca de Drobeta Turnu-Severin y la presa de las Puertas de Hierro. Y nos fuimos aguas abajo desde la presa hacia la ciudad. Así que el segundo paso consistió en identificar las secciones después de elegir Rumanía. Y luego expresé mis deseos in situ, lo que siempre hago cuando estoy cerca de un agua: quedarme con los lugareños, estar allí como invitado, no como turista. Empiezo el día con un análisis de la ciencia ciudadana junto con los niños, así que nos pusimos en contacto con las escuelas y otros clubes o asociaciones y tuvimos una invitación abierta para que la gente se uniera a la caminata y tal vez nos mostrara, hiciera un viaje, visitara algún lugar y eso es lo que hicimos entonces».

    De hecho, los dos investigadores llevaron a cabo pruebas de calidad del agua del Danubio, hablaron con los lugareños sobre su relación con el agua y también recogieron residuos junto con escolares movilizados a través del programa Patrulla Cero Plástico, mediante el cual WWF Rumanía pretende eliminar el plástico de la naturaleza hasta 2030. El componente educativo del programa Patrulla Cero Plástico se solapó con la actividad de ciencia ciudadana a través de la cual Phoa y Van der Schaaf, junto con los escolares de las localidades por las que pasan, realizan mediciones diarias del Danubio con fines científicos.

    Esta experiencia educativa involucra a los jóvenes en el estudio del río cerca del cual viven. El estudio forma parte del programa internacional de ciencia ciudadana Ríos Potables, que permite a las personas aprender más sobre la salud de sus ríos. Los socios locales en Rumanía seguirán utilizando esta herramienta ahora, una vez finalizado el viaje, y vigilarán la evolución de la salud del Danubio.
    Li An Phoa describe la alegría de vivir con los lugareños en Rumanía:

    «Es una experiencia muy especial porque vienes como una persona desconocida, ¿verdad?, como un invitado, y te vas abrazado como si estuvieras en una familia. Y eso es lo que he aprendido de estos paseos por el río: el río es como nuestro linaje. Literalmente nos conecta con el agua. Y luego, para continuar con mi idea, ese fue uno de mis descubrimientos. Me siento profundamente agradecida por esta generosidad y hospitalidad y, en segundo lugar, por el hecho de que todavía haya tal riqueza de especies que muchos de los otros países europeos han perdido, como el número de especies de aves, especies de peces, libélulas y mariposas. Está en otro nivel. Hay varios hábitats que todavía están bastante sanos, como en el delta del Danubio, que es una zona tan importante. Al mismo tiempo, se ve que, como en otras zonas de Europa, el paisaje también ha perdido gran parte de su vitalidad. Y luego las principales razones fueron la urbanización, la industrialización y la agricultura».

    A través de su trabajo, Li An Phoa, fundadora del movimiento de los Ríos Potables, quiere que los ríos del mundo sean tan ecológicamente saludables (y, por lo tanto, lo suficientemente limpios) que su agua sea apta para beber.
    Versión en español: Mihaela Stoian

  • Historias del estanque

    Historias del estanque

    El pueblo está situado en una antigua zona de inundación del Danubio, actualmente tierra agrícola. Y por haber crecido allí, Dana Pârvulescu, coordinadora del proyecto Glosario. Residencia. Arte y antropología, cuenta la historia de esta investigación llevada a cabo a lo largo de dos años:

    «Es el espacio donde crecí y al que quise volver de una manera que pudiera entender lo que le pasó en los últimos años, en los últimos 20-30 años, cuando los cambios marcaron de alguna forma la vida de los habitantes, pero también todo tipo de cambios que ha habido en los últimos años. Estamos hablando de ecología, de migración y así por el estilo. Hablamos, por tanto, de un espacio situado en algún lugar de la zona del norte de Dobrogea. Luncavița se encuentra entre Galați y Tulcea, después de cruzar el Danubio en Galați. Este espacio era un espacio lacustre, lo llamamos la zona de inundación del Danubio porque cuando llegaba el agua en primavera, el agua realmente alcanzaba las puertas del pueblo y de las casas. Esta zona de inundación desapareció en 1987, en un proceso de modernización y con la presa del Danubio. Mi infancia transcurrió prácticamente mucho en este espacio que era un estanque, un bosque de sauces con mucha agua, con nenúfares, con juncos, era efectivamente un universo lacustre».

    También nos cuenta nuestra interlocutora sobre una realidad que hoy es difícil de imaginar por parte de quienes ven este espacio de 10 km entre el pueblo y el Danubio:

    «Estos cambios fueron graduales. Inicialmente, la tierra era muy fértil junto a la presa. La gente tenía tierra en el estanque y plantaba tomates, pimientos, verduras, girasoles, todas las plantas necesarias para vivir y las cosechas eran muy ricas. Mientras tanto, las cosas han cambiado. Todavía tenemos algunos canales que aseguran el riego de ese espacio. En este momento se siembra trigo, cereales. Estamos hablando de un espacio agrícola bajo control humano, que se está explotando en este ámbito de la agricultura».

    Un pueblo que de alguna manera se ha mantenido al día con la modernidad, lo que ha facilitado la interacción entre artistas, antropólogos y la población local. Dana Pârvulescu:

    «Un experimento tuvo lugar el año pasado, cuando pasaron bastante tiempo juntos en el campo, por un lado, los artistas tratando de documentar lo que hacen los antropólogos y por otro, los antropólogos escribiendo y tomando muchas notas en el campo, que luego tuvieron que juntar. También se publicaron dos artículos en este sentido en la plataforma Explorador. Se trata de un ejercicio de trabajo interdisciplinario entre artistas y antropólogos. Se influyen unos a otros. Si a simple vista pudiera parecer que su trabajo no interfiere mucho, este año podría decir que las cosas han cambiado. Es cierto que algunos de ellos se conocían de antemano y eso, obviamente, ayuda, otros ya sabían el espacio donde iban a ir a investigar. Y fue entonces cuando intenté adaptarme a un espacio nuevo y a personas nuevas. Creo mucho en la interdisciplinariedad y los resultados de trabajar juntos son completamente diferentes. De hecho, esto es lo que se puede ver en la exposición de este año: Glosario. Residencia».

     

    El resultado de la residencia en Luncaviţa fue la exposición Aquí hubo una vez agua, que se llevó a cabo en forma de laboratorio, para lo cual los participantes continuaron recogiendo los materiales recolectados en la exposición y colocándolos en los paneles, mencionó Dana Pârvulescu:

    «Básicamente, en el espacio donde nos alojó, montamos un mapa que hacía referencia a la antigua zona de inundación en el que los antropólogos insertaron textos de las entrevistas que tuvieron con los habitantes. Mapeamos y añadimos en el mapa los lugares que se veían de cierta manera hace 30 o 40 años. Por ejemplo, aquí estaba la casa donde se capturaba el pescado y desde donde seguía su camino. Realmente hay un local que el año pasado dijo por donde ahora pasa el coche, antes pasaba la carreta y uno de los artistas presentes en la exposición del año pasado dibujó las huellas de unos caballos que hacían esta referencia a los caballos que avanzaban por el muelle y ahora ya no se ven estos caballos. Este año, uno de los antropólogos constata la desaparición de los animales de carga y su sustitución por triciclos eléctricos para los desplazamientos o por maquinaria agrícola. Hay un péndulo entre lo que pasó el año pasado y este año. Así que, si el año pasado marcamos este mapa, que era el elemento central de la exposición y que este año, con la ayuda de la escuela del pueblo, conseguimos colocarlo en la escuela para que sirviera de material didáctico a los niños de allí, el Glosario es un poco más específico este año. El año pasado hicimos una serie de talleres con los niños de la residencia y los niños utilizaron este término de estanque. Y luego, cuando les pregunté si sabían que había agua aquí, por qué ellos creen que se llama estanque, no supieron cómo responder. Habían adoptado esta palabra sin entender su significado completo. Hacían referencia a esa tierra árida cuando hablaban del estanque. Esta fue también la razón por la que llevamos el mapa a la escuela».

    La exposición la podrán ver hasta el 22 de octubre, en el Museo Nacional del Campesino Rumano en Bucarest, en la Sala del Acuario, pero la investigación continúa y quién sabe qué más destacará.

    Versión en español: Mihaela Stoian

  • Artesanía tradicional en Gorj

    Artesanía tradicional en Gorj

    En 2008 se creó oficialmente la lista del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad de la UNESCO, conforme a las disposiciones de la Convención para la Salvaguardia del Patrimonio Cultural Inmaterial, adoptada en París en 2003. Desde entonces, nueve costumbres rumanas se han registrado en esta lista.

    En la Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad de la UNESCO, Rumanía aparece con:

    • el ritual de la mordaza (desde 2008);
    • la doina (2009);
    • la artesanía de la cerámica de Horezu (2012);
    • el villancico del grupo de hombres (2013), inscripción multinacional con la República de Moldavia;
    • la caza de vírgenes (2015);
    • las técnicas tradicionales de fabricación de corteza (2016), inscripción junto a la República de Moldavia;
    • las prácticas culturales asociadas con el 1 de marzo, el Mărțișor (2017), inscripción multinacional con la República de Moldavia, Bulgaria y Macedonia del Norte;
    • el arte de la camisa bordada (2022), inscripción multinacional con la República de Moldavia; y
    • las tradiciones de la cría de caballos lipizzanos (2022), inscripción multinacional con Austria, Bosnia y Herzegovina, Croacia, Italia, Eslovaquia, Eslovenia y Hungría.

    Aunque nuestro país parece conservar bien los elementos de la tradición popular, son pocos los que consiguen transmitir la artesanía tradicional.

    En la Escuela Popular de Artes Constantin Brâncuşi de Târgu Jiu, dos artesanos imparten clases especializadas de carpintería y alfarería y nos cuentan su experiencia. Marin Daniel Preduț, instructor de la Escuela Popular de Artes, especializado en el arte de madera, nos confiesa:

    «Esta pasión surgió hace unos 3 años. Estuve 8 años en el extranjero y, cuando regresé al país debido a la pandemia, abrí un pequeño taller de carpintería. Decidí abrir un pequeño negocio en tiempos de crisis. Hasta ahora estoy satisfecho: aparte de los iconos tallados en madera, los platos y las tablas de corte, también me encargo de la construcción de cabañas, cenadores y cunas. En su mayoría, las compran personas que realmente aman la madera».

    Nuestro interlocutor nos dijo que el tallado de un icono tarda entre 20 y 60 minutos, pero luego se pinta, lo que lleva mucho más tiempo, aplicando un tinte tradicional, secreto, después de lo cual se barniza. En cuanto a las cabañas de madera, nos enteramos de que una casa sencilla, sin piso, se puede ejecutar en un máximo de siete días laborables. Se estarán preguntando ¿cuál ha sido la obra más compleja ejecutada hasta ahora?

    Marin Daniel Preduț nos cuenta:

    «Teníamos una casa de huéspedes con un parque construido tras la financiación de la UE, un gran conjunto de unas cinco cabañas, un cenador grande, un horno, una sauna: en total, medio año de trabajo».

    Marian Măgureanu, profesor de la Escuela Popular de Artes Constantin Brâncuşi, inició el círculo de alfarería en la Escuela Secundaria Tudor Vladimirescu, y nos cuenta su historia:

    «Empezamos con la alfarería, una técnica neolítica, modelada a mano. Estoy tratando de decir algo sobre la forma en que vivían sus abuelos, sus bisabuelos, que son muy jóvenes, muchos de ellos ni siquiera vieron un  salero o una jarra, se los presenté y miraron. Muy pocos son los que se han quedado en el campo por un tiempo y saben algo. Cuando vienen allí por placer y han vuelto a lo largo de un año, significa que han disfrutado, que lo han pasado bien, que vienen a relajarse, a volver a casa contentos. Como les digo, que hagan los deberes con más energía, con más placer. A veces exclaman cuando, por ejemplo, les mostré la jarra con la manija y con tetina, como se le llama, ¡era algo especial! ¡Parecía una gran, gran innovación!»

    Marian Măgureanu nos ofrece más detalles sobre cómo se obtiene la arcilla:

    «Tradicionalmente, la gente la buscaba en varios lugares que conocían, guardaban el secreto de ese lugar y la procesaban varias veces a lo largo del año. Tenían que guardarla fuera para que se congelara, luego la llevaban a la casa, la cortaban varias veces con un cuchillo, la pisaban y le agregaban más agua. Al final se hacían unos pasteles y los envolvían en algo para que no se deshidrataran. Ahora la conseguimos en varias fábricas de productos refractarios, hay varios comerciantes, intentamos encontrar la mejor opción. Después de modelarla, se deja secar un tiempo en un lugar no expuesto al sol, debe secarse lentamente, de lo contrario se deshidrata y se agrieta repentinamente. Pero todavía no tenemos un horno, ahora no podemos quemar la arcilla en el horno tradicional que tenían los alfareros, no tendríamos dónde construirlo ni cómo usarlo. Un horno eléctrico que tienen los talleres más grandes, que nosotros aún no tenemos, nos sería de gran ayuda. A través de los colegas tratamos de encontrar a alguien que tenga un horno eléctrico o un artesano de una zona cercana que use un horno y queme los objetos de vez en cuando».

    Un gran entusiasmo mantiene a estos artesanos conectados a su actividad de transmitir las técnicas aprendidas de los mayores a las generaciones más jóvenes y solo nos cabe esperar por una preservación más eficiente de esta artesanía.

    Versión en español: Mihaela Stoian

  • El festival de los sarmale y los aperitivos

    El festival de los sarmale y los aperitivos

    Isabela Coară, de la Asociación Discover Peștișani, nos cuenta sobre la edición de este año del «Festival de los sarmale y piftie», una combinación gastronómica fuera de lo común:

    «Es uno de los festivales gastronómicos más importantes de la zona de Gorj. Ha ido creciendo año tras año. Inicialmente se llamaba Festival de los Entrantes. Con el tiempo, porque esta es la costumbre en nuestro distrito de Gorj, los sarmale humeantes (rollitos de hojas de col con relleno de carne picada) se sirven con entrantes fríos o con piftie (gelatina que proviene de la carne, huesos y cartílago de cerdo), así que lo adaptamos y lo transformamos en el Festival de los Sarmale y Piftie, en memoria de Radu Ciobanu, el ex presidente de ANTREC Gorj, quien inició este festival como el Festival de los Entrantes. Quiero contarles que hay muy pocos lugares en el país donde se pueden comer sarmale con piftie. Así que en nuestra región, la piftie no se sirve como aperitivo, sino como complemento de los sarmale».

    Nos enteramos por nuestra interlocutora que, aunque comenzó con estos dos platos principales, con el tiempo los restaurantes y las pensiones de la zona, así como las amas de casa comenzaron a enriquecer sus mesas de presentación con una tarta, un pan de jengibre o un pastel, de modo que se convirtió en un festival gastronómico en toda regla.

    Isabela Coară, de la Asociación Discover Peștișani, nos relata:

    «Todos los años comienza con un concurso gastronómico y se entregan premios a los sarmale y piftie más sabrosas. También hay asociaciones clásicas, pero por supuesto los que participan en el concurso intentan idear recetas completamente diferentes y sorprender tanto al jurado como al público. Por ejemplo, en un año, la piftie de pulpo ganó el primer lugar, luego los que inventaron la piftie de pulpo, aquí en Gorj, aunque no es exactamente un plato tradicional, a base de cerdo, pollo, pavo y así por el estilo, al año siguiente vinieron con piftie de lentejas. Para los sarmale, obviamente, todas las recetas se preparan y se cocinan en hojas de parra, con carne de cerdo, pavo y pollo. El año pasado también tuvimos hojas de estevia, ajo de oso, ortigas, por lo que se pueden encontrar todas las variantes posibles, incluidas las de ayuno».

    Y a medida que el festival crecía año tras año, fue necesario cambiar de ubicación, para recibir más y más participantes y más y más visitantes. Isabela Coară añade:

    «Si hace unos años este festival tenía lugar en el patio de una pensión y se ordenaba que estas lo acogieran cada año, en el patio de la pensión, hace dos años se trasladó al patio del Colegio Tecnológico Constantin Brâncuși en Peștișani, que también resultó ser espacioso. Y aquí estamos en un claro, en Nucet, una zona muy bonita, con muchos nogales, de ahí viene el nombre y allí realizamos todas las actividades del festival».

    Isabela Coară nos aseguró que es una sensación muy interesante meterse en la boca sarmale calientes y piftie muy fría de la nevera, por eso realmente teníamos que ir a probarlo.

    Y la edición de este año también viene con novedades:

    «Es la primera vez que contamos con 60 niños de las escuelas de la localidad de Peștișani, que junto a sus madres y abuelas, participaron en el concurso gastronómico y cada uno de ellos vino con un plato casero, uno mejor que otro. ¡Y  estaban muy emocionados y entusiasmados por participar en el concurso! Como todos los años, los abuelos de la localidad de Peștișani estaban con ellos. Aquí tenemos a algunos mayores de la localidad que están involucrados en un club de ancianos en Peștișani y además de las actividades de socialización, también tienen todo tipo de talleres culinarios y con lo que hicieron en los talleres culinarios y con lo que prepararon en casa, montaron un stand muy bonito. También ganaron en una edición previa y además de ellos, obviamente, empezaron a venir restaurantes, pensiones, amas de casa de la zona, cada uno con un caldero, con una olla de sarmale, todo lo que cada uno pudiera preparar, para participar allí, para presumir de lo bien que saben cocinar. Todos montaron sus puestos de la manera más bonita posible con frutas, verduras, objetos tradicionales, jarras, productos de madera y así por el estilo. ¡Era un ambiente de cuento de hadas!».

    Sinceramente, se me ha antojado probar este maridaje gastronómico y ¡voy a probar a ver lo rico que está!

    Versión en español: Mihaela Stoian

  • George Enescu y la Inteligencia Artificial

    George Enescu y la Inteligencia Artificial

    Como todo evento cultural, por famoso que sea, quiere aumentar su accesibilidad a un público más amplio. Con motivo del 143 aniversario del nacimiento del compositor George Enescu, ARTEXIM, organizador del Festival Internacional y Concurso George Enescu, presentó este año por primera vez en el Museo de Arte Nuevo Inmersivo, el espectáculo inmersivo George Enescu – The Romanian Poem: Immersive Experience, que pretende ser una nueva serie de conciertos dentro del Concurso Enescu 2025.

     

    El proyecto invita al público a un viaje audiovisual único, explorando la vida y la obra de George Enescu a través de Poema Română (Poema Rumano), la primera ópera de Enescu compuesta cuando el autor tenía solo 16 años. Desde el principio, la proyección introduce al público en el ambiente de una sala de conciertos, donde la orquesta comienza a interpretar Poema Română. Con este telón de fondo musical, el público se encuentra inmergido en los pintorescos paisajes de Rumanía, los colores y las texturas de la naturaleza vibran en sincronía con las notas musicales. A medida que se desarrolla la música de Enescu, los paisajes se funden y se transforman en diversos lugares significativos de la vida del compositor, creando un collage biográfico visual.

     

    Cristina Uruc, directora de ARTEXIM, elogió la colaboración con Les Ateliers Nomad, que han realizado la experiencia virtual, y afirmó:

     

    «Son artistas visuales que trabajan con las últimas tecnologías y entrenan la inteligencia artificial y los elementos creados por ellos para superponer la música de Enescu y generar nuevas imágenes de vídeo. Esto es exactamente lo que representa este proyecto, una experiencia, un experimento que intentamos realizar junto con Les Ateliers Nomad. Hacen proyectos realmente extraordinarios».

     

    Gracias a las tecnologías más avanzadas, el público pudo ver por primera vez fotografías de Enescu en distintas etapas de su vida y de su carrera, animadas con la ayuda de la inteligencia artificial. La película entrelaza escenas que muestran el impacto duradero de Enescu en la música rumana e internacional, explorando su influencia en las futuras generaciones de músicos y compositores. George Enescu – The Romanian Poem: Immersive Experience es una nueva experiencia que mezcla historia, música y tecnología para dar vida al mundo y a la creación de George Enescu.

     

    En esta ocasión, se anunció una nueva serie de conciertos -la séptima- dedicada a la interdisciplinariedad artística, que tendrá lugar durante el Concurso Internacional George Enescu, a partir del próximo año, en colaboración con JTI – Immersive Experience.

     

    Gilda Lazăr, directora de Asuntos Corporativos y Comunicación de JTI Rumanía, socio principal del Concurso, añadió:

     

    «Formamos parte de este acontecimiento y somos socios fiables de eventos culturales en Rumanía. A lo largo de los años hemos creado eventos y apoyado actos y proyectos culturales e instituciones. Cuando nos propusieron este proyecto, obviamente dijimos que sí. ¿Por qué? Porque el «Poema Rumano» es el Opus número 1 de Enescu, porque fue escrito en su juventud y está dirigido a un público que no pudo disfrutarlo. Fue una ópera detenida. Durante 43 años no se representó y cuando se representó, en 1990, no se filmó, por alguna razón. No fue hasta 10 años después que pudimos reconciliarnos con nuestro pasado y con el arte detenido y tener un nuevo comienzo. El Poema Rumano está dedicado a la reina Isabel. Imaginé lo que habría sido para un joven de aquella época, con 16 años, darse cuenta de que vivía en un reino. Era como un cuento de hadas, era hermoso, era natural emocionarse. El estreno de la ópera, en París, fue todo un acontecimiento. El Ministerio de Asuntos Exteriores tiene en sus archivos la información enviada por el embajador rumano en París de aquella época».

     

    Cabe mencionar que un fragmento representativo del Poema Rumano se utilizó durante el Telón de Acero como sintonía para los programas de Radio Europa Libre, dirigidos a los rumanos que vivían bajo el régimen comunista.

     

    Gilda Lazăr elogió la asociación entre la JTI y el Concurso George Enescu durante casi 10 años, anunciando:

     

    «Como novedad, el año que viene habrá cuatro conciertos, varias actuaciones, artistas como Gigi Căciuleanu o Ruxandra Donose, todos los jueves y viernes en el MINA, en el marco del Concurso Enescu. Y así continuaremos una tradición que comenzó con la exposición inmersiva Brâncuși, que también organizamos en colaboración con la Fundación Art Production hace unos años». 

     

    La próxima edición del Concurso Internacional George Enescu tendrá lugar entre el 24 de agosto y el 21 de septiembre de 2025, bajo el Alto Patrocinio del presidente de Rumanía, proyecto cultural financiado por el Gobierno rumano a través del Ministerio de Cultura.

     

    Versión en español: Victoria Sepciu

  • ¡Chocolate Plus!

    ¡Chocolate Plus!

    Se han propuesto cambiar la razón por la que la gente compra y consume chocolate, pasando del placer al consumir un alimento a una experiencia inolvidable. Y como les gusta que las cosas sean sencillas, han optado por elaborar recetas de chocolate realizadas con semillas de cacao de primera calidad, procedentes predominantemente de Perú, a las que añaden ingredientes provenientes de la agricultura ecológica para obtener un claro beneficio para la salud. Nos lo cuenta Constantin Joițescu, fundador de la marca Chocolate con beneficios:

     

    «El chocolate con beneficios es un chocolate funcional en el que utilizamos semillas de cacao puro y lo enriquecemos con otros ingredientes procedentes de la agricultura ecológica, en función del beneficio para el que hemos diseñado cada receta. Por ejemplo, tenemos recetas para la concentración y la memoria, para la relajación, para tener energía y con efecto afrodisíaco».

     

    Nuestro entrevistado nos contó que la empresa existe desde 2014 y que hace muchos años, en San Valentín, lanzaron una edición limitada de chocolate con efecto afrodisíaco que tuvo muy buena acogida. Por eso, hace un año, cuando reorganizaron la marca, decidieron que esa podría ser una receta innovadora, y, como la ficha en la que estaban trabajando se llamaba chocolate con beneficios, al final se convirtió en el propio nombre de la marca. Constantin Joițescu, fundador de la marca Chocolate con beneficios, añadió:

     

    «Comer chocolate negro es muy bueno para la salud porque este tipo de chocolate tiene más de 400 nutrientes. No es el chocolate que comíamos de pequeños, que lleva leche y azúcar en la receta, o sea más del 60 % de contenido y que no es muy sano, la verdad. El chocolate negro hecho con semillas de cacao puro es un chocolate saludable y la Unión Europea incluso recomienda un consumo mínimo de 10 gramos al día. Básicamente hemos añadido otros ingredientes, con efecto afrodisíacos o para alimentar el cerebro. Para la concentración y la memoria hemos añadido setas, es el único chocolate producido en Rumanía con setas».

     

    Constantin Joițescu detalló:

     

    «Utilizamos tres tipos de setas: Chaga, Cordyceps y Hericium cuyas propiedades para la concentración, la memoria y el buen humor se conocen desde hace miles de años. Además, tienen antioxidantes y combinan muy bien y deliciosamente con el chocolate. Mi chocolate favorito por su sabor y que también sirve para relajarse contiene Passiflora, Ashwagandha y Rhodiola Rosea. También hay otro con Ginseng Siberiano y Brahmi que ayuda a tener buen humor y además tiene un sabor excepcional. Nuestro chocolate es una nueva categoría de producto porque no es realmente chocolate negro, tampoco es ese chocolate con leche que solíamos comer cuando éramos niños. Tiene un sabor y un gusto distintos. De hecho, si lo comparamos, todas nuestras variedades de chocolate tienen un sabor muy distinto y para nosotros es el mejor chocolate del mundo».

     

    Y porque «Somos lo que comemos», como reza un conocido eslogan, para los creadores del chocolate con beneficios lo esencial es la salud, así el cliente se beneficia de un producto 100 % natural, siempre con beneficios y una experiencia de compra en línea inolvidable. A la pregunta de si hay suficientes clientes educados para probar este tipo de experiencias, Constantin Joițescu respondió:

     

    «En relación con la población, no, pero hemos conseguido vender nuestro chocolate a más de 5.000 clientes en menos de cuatro meses lo que es toda un logro en Internet. En el sitio web tenemos reseñas, vídeos y todo tipo de materiales porque hemos intentado llegar al mayor número de personas posible. La experiencia culinaria es realmente única y los beneficios también están probados con ingredientes cuyas propiedades se conocen desde hace miles de años».

     

    Nuestro interlocutor nos aseguró que, aunque sea una exageración llamarlo el mejor chocolate del mundo, estamos hablando sin duda del mejor chocolate de Rumanía, aunque solo sea porque aquí no hay productores de chocolate.

     

    Versión en español: Victoria Sepciu

  • «Historias del 74»

    «Historias del 74»

    Cada momento de la vida trae consigo algo nuevo. A veces, el ajetreo cotidiano hace que nos alejemos un poco de lo que somos en realidad y nos convirtamos en personajes de nuestra rutina diaria: el yo en el trabajo, el rol familiar y un sinfín de otros papeles que realizamos y debido a los cuales corremos el riesgo de perder nuestra identidad.

    Claudia Maria Udrescu, la creadora del «curso imperfecto de escritura autobiográfica», como ella misma lo llama, propone una solución por ahora solo para los nacidos en el 74. «Historias del 74» es su último proyecto.

    ¿De dónde surgió la idea? Responde Claudia Maria Udrescu:

    «Desde hace unos tres años me dedico a la escritura autobiográfica. Puedes escribir sobre ti mismo cuando necesitas presentarte para un blog, para una página web, para un proyecto o cuando te enfrentas a un cambio, a una transición, ya sea profesional o particular. El proyecto se llama Historias del 74 porque de alguna manera es mi generación y sé que tanto para mí como para otros, los 50 años que cumplimos este año son como un umbral. Llega un momento en que nos preguntamos “quién soy yo, qué cosas nuevas quiero hacer, qué cosas quiero dejar de hacer”. Es un umbral que cruzamos y luego ya no somos lo que éramos antes y eso es más que la mediana edad y que la crisis de la mediana edad. Es el momento en que nos planteamos muchas preguntas: “¿Cuál es mi papel”, “cuál es mi propósito?”».

    Claudia Maria Udrescu también habló del poder curativo de la escritura autobiográfica:

    «Me ayudó mucho en un momento de transición del que surgió el proyecto de escritura autobiográfica. Me di cuenta de que cuando alguien empieza a escribir se abren muchas posibilidades: escribir un libro o escribir sobre ti mismo para el blog que has abierto porque quieres compartir tu experiencia con los demás. El problema es que en ese momento se produce el síndrome del “impostor” y te preguntas quién eres tú para escribir cuando ya se ha escrito tanto. Y es precisamente entonces cuando necesitamos escribir porque cada uno de nosotros tiene una historia invisible que se hace visible en el momento en que la ponemos sobre papel. Primero la vemos y la dejamos en claro, por eso recomiendo encarecidamente escribir a mano. Para mí, escribir es escritura autobiográfica, es claridad y mucha creatividad porque nos reconectamos con nosotros mismos. Me gusta mucho lo que dice un filósofo italiano, Ducio Demetrio, quien ha escrito muchos libros sobre la escritura autobiográfica. Dice que cada uno de nosotros lleva dentro “un tejedor”, “el yo tejedor de historias”, que teje nuestra historia que está entre el pasado, el presente y el futuro. Para mí, la escritura autobiográfica consiste sobre todo en eso y nos ayuda ante todo a despejar nuestro camino. Y también nos ayuda a tener paz mental y paz interior».

    Le preguntamos a Claudia Maria Udrescu si escribir es mejor que una conversación con un amigo:

    «Siempre recomiendo escribir a mano, la escritura es terapéutica y se adapta a cada persona. Lamentablemente, mucha gente viene y dice “ya no escribo, escribí un diario en el instituto, escribí en la universidad, alguien me dijo que no escribía bien y ya no escribo”. Es una pena, pero es genial cuando vuelven a escribir. Creo que escribir, especialmente escribir a mano, es mejor porque es algo que haces contigo mismo. Es un momento íntimo de reflexión, de calma y eso ayuda muchísimo. Cuando hablas puedes distraerte, es diferente. Pero ese momento en el que estás contigo mismo es algo sagrado: estás allí y escribes».

    Claudia Maria Udrescu hizo una declaración de intenciones:

    «Quiero que escribamos nuestras historias, encontrar personas que estén abiertas a escribir la historia de quiénes son en realidad. Personas como yo y como tú, porque vivimos en un mundo ya dominado por la Inteligencia Artificial y el Chat GPT que pueden escribir cualquier cosa. Nos conectamos a través de historias, a través de mi historia o de tu historia. Tal vez podamos crear una plataforma para difundir nuestras historias».

    Claudia Maria Udrescu también nos contó en qué fase se encuentra el proyecto «Historias del 74»:

    «Ya he esbozado la estructura y ahora estoy buscando gente que esté dispuesta a escribir y a transmitir sus historias. O simplemente escribirlas, crear el umbral y cruzarlo juntos».

    A Claudia Maria Udrescu la pueden encontrar dando su «curso imperfecto de escritura autobiográfica» en el que pueden participar todas las personas interesadas en descubrir nuevas facetas de su personalidad, tal y como se revela en su escritura. Pero si tú también naciste en el 74, ¡ven y completa esta historia de la mitad de tu vida, una historia con final inesperado!

    Versión en español: Victoria Sepciu

  • El cristal eslovaco nació en Rumanía

    El cristal eslovaco nació en Rumanía

    Los eslovacos representan el 0,1 % de la población total de Rumanía y viven principalmente en la parte occidental del país. Las mayores comunidades eslovacas de Rumanía se encuentran en los distritos de Bihor y Arad donde representan el 1,22 % y el 1,25 % de la población total, respectivamente.

    Hoy en día, en Șinteu (Nova Huta), en el corazón de las montañas de Plopiș, en la frontera entre los distritos de Bihor y Sălaj, aún quedan más de 2000 eslovacos y todos saben trabajar el vidrio y dar nueva vida a la historia local. Los eslovacos se instalaron aquí hace más de dos siglos, atraídos por los ricos bosques y la primera fábrica de vidrio de Rumanía, establecida en 1780 en Huta. Después de 60 años, en 1840, la fábrica se trasladó a la Selva Negra. Antes de la Primera Guerra Mundial, había unos 20 000 eslovacos en la zona de Șinteu.

    Actualmente, el Museo del Vidrio recuerda que en Stara Huta también se fabricaron los primeros frascos de penicilina y otros productos de la industria farmacéutica. Es una experiencia única ver lo que se producía aquí en aquella época con métodos muy primitivos. El museo también conserva algunos artefactos o pedazos de vidrio y de ampollas de la antigua fábrica de vidrio. Entre los objetos expuestos están la llave de la fábrica y un sello con las iniciales eslovacas porque cada soplador de vidrio tenía que llevar un sello personal como marca de calidad.

    Ahora, dentro del Museo del Vidrio, dos hábiles vidrieros, uno de Șinteu y otro de Sălaj, fabrican diversos objetos de vidrio. Reciclan vidrio y realizan vasos, globos terráqueos, artesanía, adornos navideños, botellas y otros componentes que venden a los turistas.
    Cornel Lupo estudió en la escuela profesional de Turda, trabaja en el sector del vidrio desde hace 40 años y declaró lo siguiente para Radio Rumanía:

    «La fabricación del vidrio es un proceso bastante complicado. Después del 96, cuando cerró la fábrica de la Selva Negra, me fui a Hungría, también a una fábrica de vidrio, donde estuve 11 años trabajando en el mismo sector. Allí participé en un concurso creativo y gané el primer premio. Luego, en 2002, me fui un año a Ucrania. De Ucrania me fui a Palma de Mallorca, España, donde me quedé ocho años, también en la fábrica de vidrio. Y, finalmente, de España acabé aquí, en Huta Slavia».

    ¿Qué objetos crean hoy los vidrieros? Cornel Lupo:

    «Todo tipo de vasos y artesanía. Hay muy pocos vidrieros que hacen artesanía. Artesanía significa trabajar sin moldes, sin prensa y sin robot. ¡No hay patrón que no podamos hacer! ¡Candelabros! La Selva Negra era la única fábrica de Europa que hacía candelabros de araña para todas las catedrales de Europa, con hojas, brazos, pantallas».

    Frantisek Koritar, quien contó la historia, también empezó a trabajar el vidrio por pasión:

    «Teníamos que trabajar donde estuviera más cerca de casa y ese lugar fue la Selva Negra. Yo soy de aquí, de Șinteu. Ahora a mi edad me gustaría transmitir el oficio a otros, pero los jóvenes no están interesados. Tuve un aprendiz que se fue en vez de trabajar. No tenemos sustitutos».

    Cornel Lupo añadió:

    «Ese joven quería aprender el oficio en dos o tres días, pero trabajar el vidrio se perfecciona durante muchos años. No se aprende en dos o tres días», dijo riéndose nuestro entrevistado.

    A la pregunta de cuántos productos de vidrio ha fabricado desde que tenía 19 años, Frantisek Koritar respondió:

    «No podría contarlos porque realizábamos una gran cantidad de productos, éramos siete personas en el equipo y teníamos las reglas establecidas. También hacía vasos y botellas de vino, entre cuatrocientas y quinientas, y para licor entre seiscientas y setecientas, en seis horas. No era fácil, además hacía mucho calor, tanto cerca del horno donde el vidrio se funde a 1450 grados Celsius, como en la elaboración, donde se estaba a 1100 grados, ¡no era nada fácil!».

    Desde Șinteu se puede llegar a la Selva Negra por una carretera directa y eso porque antiguamente el vidrio se transportaba de Rumanía a Eslovaquia por esta carretera.

    Versión en español: Victoria Sepciu

  • El Nido de Florentina

    El Nido de Florentina

    Florentina Baloș, presidenta de la Asociación El Barrilito de Sonrisas, es amiga de RRI desde hace mucho tiempo porque ya hemos presentado aquí varias de sus iniciativas benéficas. En el programa de hoy les presentamos su proyecto visionario destinado a proporcionar apoyo a los jóvenes con discapacidad graduados con el objetivo de prepararlos para la vida y para ejercer una profesión.



    Florentina nos contó la historia de esta iniciativa:



    «El proyecto se llama La Casita de Florentina o El Nido de Florentina. Esperamos ponerlo en marcha en el primer semestre de este año. Está dirigido principalmente a los jóvenes que finalizan la enseñanza básica obligatoria. También tenemos un grupo de chicos que pueden asistir a una institución postsecundaria, pero en su caso depende mucho de sus aptitudes, de lo que puedan hacer. También hay padres que se quedan con los niños, puesto que El Nido de Florentina es un hogar para los padres que no tienen otra opción para sus hijos. Son oficialmente adultos, tienen 18 años, pero en realidad no son lo bastante maduros para poder valerse por sí mismos y necesitan asistencia. Los padres no tienen otra alternativa para poder continuar su vida profesional y su vida social. Es muy difícil y, por eso, se nos ocurrió ofrecerles esta casita donde sus hijos se pueden quedar durante el día».



    Y como la escolarización resulta cada vez más difícil para los niños que viven en entornos desfavorecidos, el alcance del proyecto de Florentina es mucho más amplio:



    «Pero no nos detendremos aquí. En efecto, el 80 % de nuestra actividad se centra en los jóvenes con discapacidad, pero también tendremos La Sala Mágica, como me gusta llamarla, donde ofreceremos apoyo a los niños que necesiten clases particulares y que viven en entornos desfavorecidos. Eso porque iniciamos este proyecto con la idea de evitar el abandono escolar. No todos somos genios y tenemos que estudiar dos carreras, pero todo el mundo tiene que graduarse para poder ejercer una profesión. Es muy importante que sepan que no están solos y que no abandonen los estudios. Que finalicen sus estudios para que puedan ganarse la vida cuando sean adultos».



    Es un proceso de larga duración que a veces no produce pronto resultados tangibles, explicó Florentina Baloș:



    «Para los jóvenes que finalizan la enseñanza básica obligatoria no tenemos límite de edad. Todos serán bienvenidos. En cuanto a los niños que viven en entornos desfavorecidos, intentaremos apoyarlos hasta que se gradúen. Tienen que terminar el liceo o seguir los cursos de formación profesional y vamos a estar aquí por ellos hasta que lo logren. Les repito que para los niños con necesidades especiales no existe un segmento de edad porque al final estos adultos serán, en realidad, niños que necesitarán asistencia».



    Le preguntamos a Florentina Baloș si piensa colaborar más estrechamente con el sistema educativo estatal para ampliar iniciativas similares:



    «Empezaremos con pequeños pasos. Colaboramos muy bien con la escuela especial del distrito 6 de Bucarest que cuenta con profesores absolutamente comprometidos, abiertos y enamorados de su profesión y de los niños que cuidan cada día. Así es como proyectamos y desarrollamos muchas actividades tanto el año pasado como este año. También con pequeños pasos realizaremos actividades en colaboración con el sistema educativo estatal».



    Al igual que la mayoría de las iniciativas de Florentina Baloș, esta también se basa en concienciar los retos. Para resolver un problema, primero hay que conocerlo en detalle. Este nuevo proyecto pretende ayudar a las familias que cuidan a un joven con discapacidad o a las que no pueden mantener al hijo en la escuela. Como siempre, la determinación de Florentina Baloș, nos da esperanzas.



    Versión en español: Victoria Sepciu


  • La tradición del espumoso rumano

    La tradición del espumoso rumano

    Cada momento importante de nuestra vida se celebra con una copa de vino espumoso. Las famosas burbujas se originaron en Francia en 1531, cuando se utilizó un método «ancestral» para elaborar el Blanquette de Limoux, que se convirtió también en el método de elaboración de vino espumoso documentado más antiguo del mundo.

     

     

    El vino espumoso, según han señalado los especialistas, es el único vino que percibimos con todos los cinco sentidos básicos: el tacto, la vista, el olfato, el gusto y el oído. Así que no es de extrañar que se asocie a los momentos en los que la alegría se debe saborear al máximo.

     

     

    Liviu Gheorghe, miembro de la Asociación Wine Lover, nos ha llevado por la historia de más de un siglo y medio del vino espumoso rumano:

     

     

    «El autor del primer vino espumoso en Rumanía fue el profesor Ion Ionescu de la Brad, quien, tras un periodo de formación en Francia, a su regreso al país en 1841, elaboró un vino espumoso para el príncipe de Moldavia, Mihail Sturdza, procedente de sus viñedos de Socola. De este modo, Rumanía se convirtió en el cuarto país del mundo con producción autóctona de vino espumoso por fermentación natural en botella. En Transilvania, entonces parte del Imperio Austrohúngaro, se menciona la producción de vino espumoso en Satu Mare. Le siguen Timișoara, Cluj, Azuga y Brăila. En 1892, en Azuga, se inauguraron las Bodegas Rhein en terrenos pertenecientes a la hacienda del rey Carlos, una inversión de los hermanos Rhein, cuya familia llevaba cientos de años en Braşov. Las bodegas, construidas al exterior, con muros de 1,2 metros de grosor, también se pueden usar hoy en día.»

     

     

    Un alemán procedente de una familia de productores de vino viene a trabajar a Rumanía hacia 1900 y doce años más tarde abre un establecimiento, según ha continuado su historia Liviu Gheorghe, miembro de la Asociación Wine Lover:

     

     

    «En 1912, Wilhelm Mott creó una pequeña fábrica de vinos espumosos en Bucarest. En unos años, Mott desarrolló su capacidad de producción y empezó a exportar vinos espumosos a gran escala. En el periodo de entreguerras, la prensa estaba llena de anuncios del champán Mott, que se convirtió en una marca europea, y hoy en día los coleccionistas pagan sumas a veces exorbitantes por antigüedades que llevan el logotipo de esta bebida. En 1934, con el levantamiento del sistema de prohibición en Estados Unidos, Mott abre su propia sucursal en Nueva York. En el mismo periodo, Mott se convierte en el proveedor de los buques de pasajeros de la empresa naval rumana, también en los menús de los transatlánticos. En 1948, las capacidades de producción de Mott se nacionalizan junto con las de las casas de vinos espumosos Doctor Basilescu y Rhein, al tomar el nombre de Zarea. En 1969, el famoso enólogo doctor ingeniero Ioan Pușcă crea en Vrancea el famoso vino espumoso clásico de Panciu, y en 1974 se lanza la gama Spumant Jidvei.»

     

     

    Al analizar los métodos y las variedades de uva utilizados en la producción del vino espumoso rumano, Liviu Gheorghe ha afirmado:

     

     

    «Tenemos regiones vinícolas muy parecidas a las francesas o italianas. Por lo tanto, nuestra oferta de vinos espumosos también es muy buena. Los vinos espumosos se elaboran según el método tradicional, pero también según el método convencional, Peter Charmat (nota de la redactora: supone dos fermentaciones en un tanque a presión y es una forma más accesible y rápida de hacer vino espumoso), incluyendo el método Asti (nota de la redactora: con una única fermentación en un tanque a presión del mosto procedente de uvas aromáticas). Se utilizan tanto variedades de uva internacionales, Chardonnay, Pinot Noir o Pinot Meunier, como variedades autóctonas como Crâmpoșie, Frâncușă, Fetească Regală, Fetească Albă, Mustoasă de Măderat, Novac o Fetească Neagră. Las inversiones importantes en viñedos y tecnología nos permiten producir vino espumoso que cubre todas las gamas de estilos, de precio y de calidad. Tenemos vinos espumosos blancos y rosados, con azúcar residual de Brut, natural hasta dulce, tenemos blanc de blanc, tenemos blanc de noir, tenemos vinos perladost, también tenemos vinos petillant (nota de la redactora: El vino petillant es un vino con burbujas muy ligeras, con un leve perlado). Entre los vinos espumosos que elaboramos, que se acercan mucho a la calidad de los de Champagne, están los que se elaboran siguiendo exactamente los mismos procesos que el champán original, utilizando tanto variedades internacionales, populares para los vinos espumosos, como variedades locales, que expresan el terruño del que proceden. Estos vinos recorren un periodo de autólisis de hasta 48 meses, que impregna el vino de finas notas de masa, pan fresco o magdalena. Los vinos destacan por una acidez intensa, un perlado fino y persistente, y por su equilibrio, su complejidad, su estructura y su elegancia. Muchos tienen un potencial de envejecimiento excepcional.»

     

     

    Liviu Gheorghe ha afirmado que los vinos espumosos rumanos también son conocidos internacionalmente:

     

     

    «Desde hace varios años, los vinos espumosos rumanos ocupan los podios en los concursos internacionales de especialidad, como el Campeonato Mundial de Champán y de Vinos Espumosos, y como el Concurso Internacional de Vinos de Bucarest. Los vinos espumosos son considerados unos de los vinos más versátiles, respecto a las asociaciones culinarias, y pueden servirse con entrantes, platos principales, postres, o simplemente para socializar. Un vino espumoso blanco, con azúcar residual en la zona de bruto, se asocia idealmente con platos culinarios como: huevas, mariscos, crustáceos, platos de pescado, quesos cremosos finos o platos de pollo. Un espumoso rosado de la misma zona de azúcar residual se puede asociar con platos de salmón, pescado ahumado, paté de hígado de pato o ganso, platos de ave o ternera e incluso platos tailandeses. Los vinos espumosos dulces serían ideales con postres a base de nata, tartas de frutas, tarta de chocolate e incluso helado.»

     

     

    Así termina nuestra historia de hoy. ¡Que el vino espumoso rumano nos dé cada vez más alegrías!

     

     

    Autora: Ana-Maria Cononovici

     

    Versión en español: Monica Tarău

     

  • Campamentos contra el acoso escolar

    Campamentos contra el acoso escolar

    Han llegado las vacaciones, en tren desde Francia era una rima muy conocida cuando éramos niños. Y al mismo tiempo, no se trataba de acoso, ni mucho menos de organizar campamentos para trabajar en la solución de este fenómeno, que finalmente se aceptó.

    Eliza Vlădescu, responsable de comunicación de la Asociación Zi de bine, nos habla sobre la novedad de estos campamentos:

    «La idea no es realmente nueva. Nosotros, el primer campamento contra el acoso escolar, lo organizamos en 2022. El campamento de este verano será prácticamente el 4º campamento contra el acoso escolar y decidimos volver a él. El año pasado nos tomamos un pequeño descanso de este tipo de campamento y fuimos a otro de nutrición, y este verano decidimos repetir ambos, porque vimos que la necesidad es muy alta, después de ambos campamentos, recibimos muchas solicitudes de parte de los padres con preguntas si todavía lo estamos haciendo, cuándo y cómo lo haremos, y si ya estamos anunciándolos o pensando en hacer más».

    ¿En qué consiste un campamento contra el acoso escolar? Eliza Vlădescu, responsable de comunicación de la Asociación Zi de bine:

    «Lo hemos diseñado de esta manera: el acoso está muy presente en las escuelas, pero no es necesariamente un problema que esté relacionado exclusivamente con la escuela. El acoso tiene que ver con el comportamiento de una persona y no es un rasgo de personalidad. Esto es lo que acabamos haciendo cuando nosotros mismos hemos sido víctimas y no hemos visto otra salida que convertirnos nosotros mismos en agresores. Hay dos ambientes definitorios para niños y adolescentes: la escuela y también el hogar. La escuela y el entorno familiar son como dos vasos comunicantes y siempre puede desbordarse de uno al otro, dependiendo de dónde surjan estas relaciones disfuncionales, invalidando la comunicación, etcétera. Por eso, cuando pensamos en el campamento contra el acoso escolar, que es para niños, dijimos que era obligatorio sentar a la mesa a los padres y a los profesores, porque lo que el niño acaba haciendo en casa o en el colegio no es más que el síntoma de un sistema relacional disfuncional. Y el acoso no es un problema que puedas dejar sobre los hombros del niño, para que lo resuelva por sí mismo, aunque, por supuesto, intentas empoderarlo allí donde esté. Pero los padres y los profesores son responsables de los niños y son ellos los que pueden ser parte del problema. Todos conocemos situaciones en las que las enfermedades se inician en casa o vienen de profesores a alumnos como un verdadero abuso de poder. Pero al mismo tiempo, los padres y los profesores pueden ser parte de la solución. Y eso es lo que hacemos en el campamento. Traemos parejas de padres e hijos, 30 parejas de padres e hijos y unos 15 o 20 profesores y maestros de primaria y secundaria y trabajamos en estos tres grupos de forma independiente. No se cruzan, la intersección es mínima entre las actividades. Cada grupo está dirigido por un equipo de psicoterapeutas y trabaja por edades y sobre los problemas y las necesidades del grupo, por separado».

    Le preguntamos a Eliza Vlădescu si sucede que, durante los campamentos, los participantes descubren que, tal vez, ciertos comportamientos que se consideraban normales en casa son en realidad de acoso o que se consideraban tradicionales en las escuelas, son de acoso, sin que el adulto que los practica sea consciente de ello:

    «Hubo muchos momentos en los que nos hemos dado cuenta de los patrones de comunicación entre padres e hijos, entre profesores e incluso entre padres y profesores. Esto de echarse la culpa, de echarle el muerte a la otra parte. Hubo algunos momentos de conciencia que no fueron nada fáciles. No es el campamento contra el acoso escolar más fácil que hacemos, porque implica mucha vulnerabilidad y me he dado cuenta de que cuando salimos del papel de adultos, del papel de padre y profesor, también somos como los niños que necesitan orientación, que realmente necesitan hablar con alguien que está pasando por una situación similar y recibir retroalimentación y ayuda y algo más técnicas con las que pueden llegar a casa y a la escuela y ponerlas en práctica y resolver una situación. Y efectivamente, todos venimos al campamento con algunos miedos, tanto niños como adultos, este miedo a la vulnerabilidad y a la apertura a los extraños, pero, al final, les digo que ya no saben ni cómo estar de pie».

    Eliza Vlădescu añade:

    «Lo que me gustaría señalar es que puedes salir de una situación en la que, por alguna razón, te has convertido en víctima en algún momento. Hay niños que llegaron al campamento desde las tres perspectivas, como testigos, como víctimas y como agresores. Y tuve hijos agresores que entendieron por qué terminaron acosando. Los padres que entendieron por qué sus hijos terminaron acosando y que encontraron otras formas de afrontar los comentarios, las respuestas, las situaciones, encontraron en ellos resiliencia y el deseo de hacer el bien. Salí de allí con niños que desde su posición de acosadores querían ser voluntarios, para ayudar y contribuir a resolver este problema para otros niños como ellos».

    No creo que haya nada más que decir, excepto ¡Bonitas vacaciones para todos!

    Versión en español: Mihaela Stoian

  • ¡Leamos Timisoara!

    ¡Leamos Timisoara!

    ¡Nos encanta la gente que lee! Y nos gustan los proyectos relacionados con los libros, por lo que no se nos podía escapar una iniciativa en Timişoara: Leamos Timișoara, el proyecto que consiste en encuentros a través de los cuales se promociona a los escritores y libros sobre Timişoara.

    Patricia Lidia es de Timișoara y ha organizado varios eventos culturales a lo largo del tiempo, como el club de lectura en la Penitenciaría de Timișoara, que fue el primer club de este tipo en el país, así como talleres de escritura creativa con niños y otros proyectos. Le preguntamos a Patricia Lidia qué es Leamos Timișoara:

    «Una combinación lúdica entre la lectura y Timișoara. Queremos promover a los escritores de Timișoara y los escritos sobre Timișoara, porque a menudo tenemos la sensación de que al estar a distancia y en una determinada zona geográfica distinta de la capital del país, caen en un pequeño “cono de sombra” y los escritores de Timișoara no son precisamente conocidos en casa. Es por eso que hace 4 años lanzamos esta iniciativa. Son encuentros, no formales al fin y al cabo, queremos que sean discusiones más que presentaciones de libros, más que lanzamientos en el sentido conocido, en los que podamos ver cómo se refleja Timișoara en los escritos de la gente de Timișoara».

    Por lo general, los participantes son escritores, aunque en su vida cotidiana tienen otras profesiones, nos dice nuestra interlocutora, quien además nos cuenta:

    «Cada uno de nosotros descubrió la historia de Timișoara cuando investigamos para nuestros libros y cada uno se dio cuenta, a su manera, de que la Plaza de la Libertad, los edificios barrocos, los lugares elegantes de la Fortaleza, la Plaza Traian y Fabric, una ruina, desafortunadamente, tienen historias mucho más cautivadoras de lo que nos imaginábamos, o de las que no sabíamos, porque, de alguna manera, uno tiende a glorificar las ciudades a las que va de vacaciones y a ver solo el lado bonito de las vacaciones que pasa en otros lugares, pero se olvida de que vive en una ciudad preciosa, que a su vez tiene una historia, un encanto especial, que también ven los turistas que vienen a la ciudad. Y descubrimos los tesoros escondidos de la ciudad y nos unieron el deseo de mostrar al mundo que esta ciudad, llena de historia, poco conocida, no es solo una colección de vestigios de los Habsburgo, ingenieros aburridos, sino un destino cultural, un lugar donde tuvieron lugar importantes acontecimientos históricos, que no se mencionan en la historia que se enseña en las escuelas y sobre el que no solo los adultos, los ancianos que pasaron por esos períodos, sino también los niños deben conocer, para comprender realmente el contexto en el que se desarrolló Timișoara».

    Un enfoque totalmente apolítico, como nos asegura Patricia Lidia:

    «No hacemos política, no tenemos nada que vender. Simplemente queremos encontrarnos, periódicamente, con escritores de Timișoara, con lectores de Timișoara, apasionados por la ciudad, para discutir sin preciosismo, como amigos, sobre los rincones de Timișoara que cautivaron nuestra atención y escuchar fragmentos de los libros inspirados en ellos, leídos por los escritores que descubrieron estos maravillosos rincones. Empezamos con un grupo de amigos, en el que éramos seis u ocho personas que nos reuníamos, y en el último evento éramos más de 35. Por primera vez para nuestra sorpresa y alegría, tuvimos que traer sillas de los vecinos, porque había tanta gente que no teníamos más asientos. Llevamos a cabo nuestras actividades en dos ubicaciones: Cărturești Mercy en el centro de la ciudad, y en AmPm, un local en Fabric, y recientemente incluso hemos comenzado una colaboración única, con una tienda de antigüedades en Timișoara, la Tienda de Antigüedades Queen, que creará una estantería con los escritores de Timișoara».

    Le preguntamos a nuestra interlocutora qué cosas interesantes descubrió a través de estas lecturas:

    «Uno de los libros básicos que he descubierto ahora es de Cristian Vicol, Breve historia de Timișoara hasta 1716, que no solo arroja luz sobre datos históricos, tal como los vemos en las clases, en la escuela, sino que los entrelaza con historias e imágenes cautivadoras y ofrece una nueva perspectiva sobre la historia y los mitos de la ciudad. De este libro aprendemos que, aunque en la escuela nos hablan de la famosa Batalla de Posada de 1330, en la que el rey húngaro Carol Robert de Anjou fue derrotado y puesto en fuga, no nos dicen que en realidad tenía su base en Timișoara, que en aquella época formaba parte integral del Reino de Hungría, y que la propia operación militar partió de aquí».

    Patricia Lidia confía en el futuro, en cuanto a lecturas y escritores de Timișoara, por una razón que ella misma nos revela:

    «Más allá de los escritores establecidos, aunque sean aficionados, que tenemos en Timișoara, tratamos de cultivar la pasión por la escritura, por Timișoara, y también entre los niños. Como resultado, también tenemos pequeños escritores. Estoy muy orgullosa de la contribución que he conseguido tener en la publicación de un libro coordinado por la profesora Elena Manolache, que tiene una clase maravillosa en la Escuela Secundaria número 25 en Timișoara y que publicó un libro en el que los niños son escritores: La vida cotidiana en la lectura, por lo que los escritores que ya están en Timișoara o las futuras generaciones de escritores en Timișoara están asegurados y les garantizo que tendremos sorpresas maravillosas en el futuro».

    Y a medida que se acercan las vacaciones, ¡no nos olvidemos de leer!

    Versión en español: Mihaela Stoian

     

  • ¡Sobre los rumanos, desde muchas perspectivas!

    ¡Sobre los rumanos, desde muchas perspectivas!

    Las tradiciones, costumbres y hospitalidad de los rumanos impresionan a los visitantes extranjeros, así como las zonas pintorescas que invitan a descubrirlas. Recientemente, sin embargo, también ha aparecido un libro, primero en francés y unos años después en rumano, en el que la experiencia de la escritora francesa Christine Colonna-Cesari, afincada en Rumanía, conduce a los lectores a un conocimiento muy profundo de nuestro país. ¡Ils sont fous ces roumains! ¡L’Eldorado Roumain!, o ¡Están locos estos rumanos! El Eldorado rumano, es el libro del que la propia autora nos habla.

    Ya se sabe a nivel internacional que Rumanía fue un país de repatriación de muchos europeos en el período de entreguerras. Cómo se presenta el país a los extranjeros que deciden establecerse aquí, lo averiguamos gracias a Christine Colonna-Cesari, que lleva en nuestro país desde su jubilación en 2018:

    «En 2018 decidí dejar Francia y retirarme a Rumanía, porque era un país y una cultura que había apreciado y conocido durante mucho tiempo, con la intención de continuar mi vida como escritor y editor de libros en Francia y en Rumanía, porque tengo libros vendidos en Francia y hacía tiempo que tenía la intención de hacer un hermoso álbum en el que mostrar las bellezas de Rumanía, que todavía es poco conocida en Francia, y donde todavía persisten algunos clichés muy estúpidos, así que escribí este libro en 2019, y luego logré publicarlo en rumano».

    ¿Qué le llama la atención a un extranjero que llega a Bucarest?

    «En primer lugar, es sorprendente. Como le decía, lo primero es que la señalización no es para nada la misma que en Francia. Así que nos perdemos con bastante facilidad. No hay nombres escritos en letras grandes, no hay números escritos en letras grandes, en todas partes. Pero veo que para los rumanos no es un problema. Están acostumbrados. Otra cosa que sorprende son algunos detalles, que marcan una gran diferencia. Y puede parecer un detalle la práctica de dar cambio, a la hora de comprar. Si el vendedor no tiene monedas para dar cambio, le parece normal no hacerlo. Y confieso que en Francia esto no existe. Por ejemplo, si quieres comprar algo y te faltan algunas de las monedas que tendrías que dar en el mercado, o los comerciantes no las tienen, las monedas ya no se dan y todo parece normal. En Francia esto no pasa y la primera vez, cuando vi que no daban cambio, se lo pedí y el comerciante realmente no quedó satisfecho. Así que me tomó un poco de tiempo darme cuenta de que esto es parte de las costumbres. Otro aspecto es la gestión del espacio-tiempo de los rumanos, que es completamente diferente a la de los franceses. Aquí vivimos mucho más fuera del tiempo, así que los compromisos adquiridos sobre horarios, horas, días, cambian siempre en el último momento. Y para los franceses que no estamos acostumbrados, es muy desestabilizador y muy molesto, pero nos acostumbramos y aceptamos que aquí es así. Así que estos son los primeros choques principalmente».

    Sin embargo, una vez acostumbrada a estos aspectos, nuestra interlocutora no deja de estar encantada con nuestro país, por lo que añade:

    «Después de eso, es muy fácil adaptarse aquí. Hablan inglés, y los rumanos son muy buenos en hablar inglés, eso me ayudó mucho. Y luego la gente es amable, la gente es acogedora. En Francia no existe la violencia social, así que no tuve ningún problema en adaptarme aquí. Me gustaría que la gente recordara lo que traté de transmitir en este libro. Las profundidades del alma rumana, las profundidades de la sensibilidad, de la creatividad rumana. Los rumanos, para mí, están más inclinados a lo espiritual que los franceses. También son una nación muy artística. Vemos muchos más colores aquí que en Francia. Hay una relación con la naturaleza, una relación con las flores, por ejemplo, los rumanos tienen una relación fantástica con las flores. Siempre me sorprendo cuando me encuentro con hombres en la calle con enormes ramos de flores, como nunca se ven en Francia. Es una nación también respetuosa, me parece, en la vida cotidiana, son detalles que pueden parecer insignificantes, pero cuando vienes de Francia, te das cuenta de que la gente no te empuja en el metro o en la calle, como en Francia. Los espacios públicos están limpios, lo que no es particularmente el caso en París. Es como si hubiéramos retrocedido un poco a los años 60 en Francia cuando todavía había una dulzura de ayer, una calidad de vida en Francia, un respeto, una civilización que se perdió de vista en Francia y que reencontré aquí».

    Le preguntamos a Christine Colonna-Cesari cómo percibieron el libro los lectores francófonos:

    «Con mucho asombro y emoción. Todo el mundo me dice: no nos imaginábamos que Rumanía fuera así. Gracias por mostrarnos Rumanía desde este ángulo. En general, hay mucha emoción, mucho asombro y felicitaciones. Es una apertura del corazón y quieren venir a compartir las mismas experiencias, que les habrían hecho venir a descubrir. Además, tengo amigos franceses que me han dicho directamente que les hablo de la Francia de los años 60, donde todavía existía este respeto, esta forma de vida amable y luego, si quieres, todos estos son detalles de la vida cotidiana. Pero este libro es mucho más profundo que eso. Y yo soy una persona que observa mucho, que piensa mucho en lo que está pasando, en la historia. Los que están en Europa Occidental no se dan cuenta en absoluto de lo que es Europa del Este, de cuáles son sus valores, no se dan cuenta, por lo que juzgan en base a sus propios criterios, me gustaría hacer que estos valores traspasaran fronteras, hacerles entender cuáles son los fundamentos de la cultura humana en los últimos siglos».

    Más allá de las experiencias rumanas de la autora, el libro también contiene una segunda parte, a saber, reportajes con fotos muy bellas, 220 fotografías, que sorprenden encuentros con personas excepcionales que hacen cosas excepcionales.

    Versión en español: Mihaela Stoian